Agustín Biasotti es un biólogo que se encuentra en Antártida realizando misiones científicas. "Los proyectos van cambiando, pero la idea es la misma, lo que buscamos es conocer la salud y ambiente de este ecosistema", contó.
"Cada base es un mundo, están compuestas por grupos diferentes , en algunas hay más civiles que militares, o de otros servicios, pero en esta en particular hay más militares, un guardaparques y yo, que somos los únicos civiles de la base en la dotación de invierno, después en la de verano viene más científicos a investigar, porque el verano permita hacer muchas más cosas y más barcos dando vueltas, y se puede planear con más personas quedarse dos o tres meses", describió Agustin Biasotti , biólogo, invernando en la Isla Laurie, Base Orcadas del Sur, Antártida argentina.
En ese sentido, destacó que "esta base tiene mucha historia, esta de 1904 y desde entonces se mantiene investigaciones constantes, los proyectos van cambiando, al fin y al cabo es conocer la salud de este ecosistema, hay especies que son únicas, y las adaptaciones que tienen para vivir en este ambiente son muy importantes, el sol sale a las 9 y las 2 de la tarde, ahora tenemos poca rango de luz".
"Todo lo que sea Antártida, está bajo el tratado antártico, es un espacio destinado a la ciencia y a la protección de este ambiente antártico. Mi trabajo particular es hacerme cargo de la parte de biología, sismología y geodesia. Todos los proyectos científicos que se hacen en la zona, trabajos con aves, pingüinos, mamíferos marinos, los mantengo durante el año, hago muchos censos, muestreos", explicó.
"Los proyectos van cambiando, pero la idea es la misma, tener parámetros, ir controlando las poblaciones que hay por la zona y saber en qué estado están, al fin y el cabo lo que buscamos es conocer la salud y ambiente de este ecosistema", detalló.
Sobre su experiencia en el lugar expresó que "hay una especie de cultura antártica, donde los sábados alguien hace pizza, afuera en la nieve, con hielo, es un ritual, es un pequeñez, pero se repite en todas las bases antárticas, a partir de ese día nos llamamos invernantes, pasamos a otra categoría, es como un bautismo".
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