Es un tributo a la recordada cantautora peruana que el guitarrista y compositor Lucho González editó en 2009. “Siempre estuve ligado a Chabuca y me hizo prometerle que haga todo lo posible para que su música no se muera”, contó el artista.
Acompañado por Hubert Reyes y Martín González en cajones, Raúl Di Renzo en violín, Jorge Bergero en cello y Laura Albarracín en voz, Lucho González ideó el disco a partir de una perspectiva particular que "no tiene por qué estar restringida a la música clásica”, aclaró. El artista, que dedicó quince años de su vida a tocar junto a Chabuca Granda, afirmó que “entre la cantidad de estilo que admiten las canciones de la señora, que como toda buena canción la podías vestir de muchas maneras diferentes, la idea en este trabajo, fue abordar su música desde una mirada camerística”.
“A la formación particular de la música de cámara, se me ocurrió entonces agregarle un violín, un chelo, y dos cajones que, junto con la voz de Laurita Albarracín, cantando exactamente las melodías como Chabuca las compuso, hemos logrado transformar la obra de la señora, en otra cosa, sin que por eso se pierda el swing”, describió quien nació en Lima, Perú, y que, desde hace varios años, reside en Argentina.
Lucho González eligió para el álbum composiciones emblemáticas y otras menos conocidas del repertorio de Chabuca Granda. “Entiendo que canciones como ´Fina estampa´, ´La flor de la canela´, ´José Antonio´, eran la preferencia de la gente, pero también sé que se pasaban por alto canciones tan bellas como ´Quizás un día así´, ´Rosas y azahar´, entonces todas ellas estaban en una especie de lista para alguna vez defenderlas”, explicó el ex integrante de exitosos tríos como Vitale-Cumbo-González y Vitale-Baraj-González. “Eso fue lo que paso cuando comencé a pensar en este trabajo, donde hay canciones tradicionales, pero no está ´Fina estampa´, no está ´José Antonio´, pero sí ´La flor de la canela´ porque es el ADN de la señora, y siempre arrancaba sus presentaciones con esa canción y, por eso el disco empieza también de ese modo”, repasó.
EL ÁLBUM REÚNE COMPOSICIONES EMBLEMÁTICAS Y OTRAS MENOS CONOCIDAS DEL REPERTORIO DE CHABUCA
“Chabuca de Cámara” fue editado por MDR Records –sello que quebró al poco tiempo de editar el disco– y grabado en estudio Los Elefantes entre julio y agosto de 2008 y mezclado por Lito Vitale. Del segundo trabajo de estudio de Lucho González, forman parte además "La flor de la Canela", "Bello durmiente", "Gracia", "El puente de los suspiros", "Coplas a Fray Martín", "Callecita encendida", "Cardo o ceniza" y "Me he de guardar". Ésa última canción “Chabuca se la dedicó a su propia muerte. Ella no tenía miedo de hablar de ese tema, y lo ha tratada de manera elegante y con mucha fineza”, explicó y agregó que “lo último que me dijo cuando se fue a operar a Estados Unidos, fue que no me moviera de Argentina porque si salgo de ésta, me vengo a pesar una muy buena temporada y vamos a trabajar en diferentes proyectos”.
"Siempre estuve ligado a Chabuca"
María Isabel Granda nació el 3 de septiembre de 1920 en Lima, Perú y murió en Miami un 8 de marzo de 1983. Un 3 de septiembre del 2009, 89 años después del natalicio quien enriqueció el cancionero latinoamericano, con sus aportes a la música y poesía criolla, andina y afro-peruana, Lucho González, le rindió homenaje presentando “Chabuca de Cámara”, un trabajo que hoy está disponible en todas las tiendas digitales.
“Siempre estuve ligado a Chabuca y me hizo prometerle que haga todo lo posible para que su música no se muera, como ninguno de sus hijos es músico, depositó en mí esa confianza. Y hasta hoy me siento responsable de hacerlo y tengo miedo de fallarle”, contó González.
“Por eso para mí es una felicidad cumplirle una vez más con todo esto, y mantenerla todo lo viva que sea posible. Chabuca fue para mí una persona inolvidable, de la que he tenido la suerte de aprender muchas cosas. Entonces espero que a quien escuche estas canciones les produzca lo que ella siempre quiso hacer con su música, que no era otra cosa que hacer el bien", afirmó.
