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El Engrupe volvió a los escenarios con el estreno de un disco

La banda platense, con 18 años de trayectoria, brindó un espectáculo estrenando las canciones de “Micro ondas” en la Estación Provincial, el espacio cultural donde comenzaron su recorrido.

Después de un tiempo de inactividad, “El Engrupe” regresó a los escenarios para presentar en sociedad “Micro ondas”. Se trata de su tercer disco, el cual fue presentado en Estación Provincial, en donde interpretaron las once canciones que integran la nueva producción. “En ese espacio prácticamente nació El Engrupe”, señala uno de sus integrantes, Horacio Quiroga.

“En un encuentro de murgas, donde también nació Fulana de tal, nos conocimos con Leo Bertora, con Sebastián Cavilla y Ricardo Mascarpone, nuestro mascarón de proa, y fue esa la semilla del grupo”, cuenta Quiroga, voz y guitarra de la agrupación nacida en 2005. “Luego de aquello comenzamos a juntarnos y así nacieron las primeras canciones y acá estamos, 18 años después, presentando nuestro tercer disco”, suma en diálogo con Cacodelphia.

La banda cuenta con tres discos editados: Mundo Loco (2010); Milonga rara (2012) y Micro ondas (2019). Este último trabajo contiene 11 canciones que fueron grabadas en el Conservatorio Gilardo Gilardi por Juan Ponche Abraham y trabajadas luego en el Estudio de Horacio Quiroga. “En ese sentido, es este un disco de laboratorio. Grabamos las bases en el Conservatorio y luego en la casa de Horacio, buscamos la sonoridad que pretendíamos a través de algunos sintetizadores, a partir de algunos sonidos que generaron un disco más complejo y completo, con respecto a los anteriores”, expresa Bruno Pianzola, el bandoneonista del grupo.

Hay muchos arreglos de Juani Puente, quien aportó mucho para lograr la sonoridad que andábamos buscando”, agrega Quiroga. Por su parte, Sebastián Cavilla, bajista y voz del grupo, manifiesta que “la búsqueda personal de cada uno de los integrantes también influyó en la sonoridad de este trabajo, que fue grabado antes de la pandemia y que tiene los mismos ingredientes que los discos anteriores, pero con más condimentos. Además, la producción fue distinta, porque nos dimos el tiempo para jugar mucho, probando efectos y pequeños detalles”.

Mixtura musical

Desde su origen, El Engrupe se ha caracterizado por su modo de mixturar ritmos folclóricos del Río de La Plata (tango, candombe, murga, milonga con rock, reggae y samba) que brinda la base perfecta para desarrollar una letrística amable, bella, simple y comprometida.

Respecto de la composición de las canciones, es este un disco más participativo; si bien los arreglos siempre fueron colectivos, tenemos ya la suficiente confianza en nosotros mismos para insistir o desechar algunas ideas”, detalla Horacio Quiroga.Se trata de canciones simples que dan cuenta de una foto, lo que nos sucede cuando nos juntamos, se buscó de ese modo pintar un pequeño cuadro a partir de algunas palabras que digan y suenen lindo”, dice el músico, que asegura que en pandemia no logró componer absolutamente nada.

“El sueño mío era en algún momento poder armar algo para grabar en mi casa y tener tiempo a disposición. Ese día finalmente llegó pero en un contexto extraño donde tuve todo el tiempo del mundo y no pude componer ni una sola canción. Entonces, comprendimos que no era solo tiempo el que necesitábamos, necesitamos también ese ingrediente con el cual componer, y que es el encuentro con el otro. Recién cuando volvimos a juntarnos logré terminar alguna canción. La pandemia fue una pausa brutal hasta en la creación, imposible de crear sin el colectivo”, manifiesta.

El tercer trabajo de El Engrupe -el primero que la agrupación sube a las distintas plataformas de música-, tiene también un lugar reservado, para la música instrumental. “Siempre hubo lugar para la canción instrumental, pero en este disco, esos momentos aparecen como conductores entre tema y tema, se trata de micromilongas que quedaron muy bien y que acercó Juani Puente”, repasa Pianzola, autor de “Rovirado”, una obra instrumental dedicada al bandoneonista Eduardo Rovira.

“En el disco hubo lugar para el juego y la improvisación que es lo que más placer nos genera, de ese modo fueron saliendo las cosas, más simple de lo que parece, jugando y disfrutando, cuestiones vitales a la hora de estar vivo, porque dejás de jugar y sonaste. Esa sigue siendo la excusa perfecta para encontrarnos todos los miércoles a tocar unos temas, a tomar algo, a charlar y darnos un abrazo”, dice Quiroga señalando de ese modo que el nuevo trabajo conserva la esencia de ese grupo de amigos que hace 18 años comenzó a escribir la historia de una agrupación que hace música para el alma.

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