Tras dos semanas de protestas en rechazo a la modificación parcial de la Constitución por parte del gobernador Gerardo Morales, el conflicto escaló hasta una represión en Purmamarca que dejó heridos y detenidos.
"Es una lucha que arrancó por salarios, que tuvo un protagonismo enorme de los pueblos originarios. La primera etapa fue cuando aprobaron la reforma, y ahora en una segunda de culminación donde la piensa jurar, lo que significa que va a ser ley", cuenta Santiago Seillant del SEOM (Sindicato de Empleados y Obreros Municipales) de Jujuy, que se moviliza en la provincia.
En ese sentido remarca que "es una reforma que es rechazada por amplios sectores de la sociedad bajo organizaciones, organismos de DDHH, sindicatos, en estos momentos hay 14 cortes de ruta en toda la provincia, son masivos con 4 o 5 mil personas en cada lado, es un paro general dentro de un feriado".
La reforma parcial de la constitución impulsada por Morales propone la regulación del derecho a la protesta, la propiedad de las tierras de las comunidades originarias en donde se hallan recursos naturales como el litio y nuevos mecanismos para la selección de jueces.
“Nos reagrupamos en función de la palabra que dicen los consejos comunales para fortalecer Purmamarca, que es el lugar donde se dio la represión y que más dolor ha traído a nuestro pueblo. Todo lo que se ha visto a nivel nacional, las imágenes, la brutalidad, todo lo que ha contado nuestra gente de situaciones que han vivido”, relata René Machaca, miembro del pueblo Kolla de Tilcara, antropólogo y becario del Conicet.
Al aire de Los Mundos Posibles señala que se trataba de “un corte total, cada hora se daba paso, nuestra comunidades habían decidido hacerlo en función de que no había un llamado al diálogo de parte del gobierno de Gerardo Morales, hoy está tratando de llamar a una reunión provincial manipulado lideres indígenas”.
“Previo a la represión del sábado Morales lanzó un decreto que amedrentaba a los docentes a que vuelvan a las escuelas, y quienes no lo hacían se les iba a descontar todos los días de huelga, y amenazando a todo el sector que los iba a dejar como cesantes. Y ya por lo que vio que venía lo derogó, y esto es lo mismo que quería replicar con la nueva constitución”, describe el referente.
Las primeras movilizaciones comenzaron el 5 de junio con una manifestación en San Salvador de Jujuy, impulsadas por los docentes de la provincia para exigir mejoras salariales. En principio se trató de una protesta sectorial que luego se replicó en otras áreas y creció su respaldo. Durante el fin de semana, un corte de ruta en Purmamarca conllevó a una intervención represiva por parte de la policía.
“Hay en estos momentos una manipulación, creo que (Morales) está tratando de manipular a algunos lideres (indígenas) para que vayan y se sacan la foto, diciendo que llama el diálogo. Como la comunidad de Catua, de donde se está sacando el litio”, sostiene.
Por último asegura que "la resistencia sigue estando a partir de las asambleas que se están organizando para ver cómo se sigue con la metodología de lucha".
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