Es una nueva línea del plan LoteAR a cargo de la Secretaría de Integración Socio Urbana. Los terrenos serán urbanizados y destinado a personas que sufren hacinamiento y vivienda precaria.
El programa busca crear nuevo suelo urbano para dar respuesta al déficit habitacional que hoy existe en el país. La Secretaría de Integración Socio Urbana -SISU-, que depende del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, viene impulsando políticas públicas para abordar el derecho a la vivienda digna, enfocándose en las personas que viven en los más de 4.400 barrios populares. Fernanda Miño, a cargo de la Secretaría, afirmó que "en las recorridas que vamos teniendo, viendo los distintos proyectos y obras que encaramos, vemos el hacinamiento crítico de muchos barrios. Por más que hagamos el esfuerzo de llevar los servicios básicos si no podemos fortalecer el acceso a la tierra es imposible mejorar la situación de muchas familias”.
"sin el Aporte Solidario a las grandes fortunas, sería imposible lograrlo"
La SISU gestiona el Fondo de Integración Socio Urbana, un fideicomiso conformado con un porcentaje del Aporte Solidario de las Grandes Fortunas y del Impuesto PAIS, entre otros ingresos. A través de este Fondo se financiará la compra de macizos de tierra y su urbanización, que consistirá en el loteo, la instalación de servicios básicos y la construcción de equipamiento comunitario (espacios educativos, de salud y recreativos). Para ello, se convocó a privados para que realicen ofertas de tierra que no presenten riesgo de inundabilidad, focos de contaminación, riesgos aluvionales, de erosión del suelo o tecnológicos; además, los inmuebles deben encontrarse en zonas urbanas, periurbanas o rurales cercanas al centro urbano; con una superficie mínima de una hectárea. La fecha límite para la presentación de ofertas es el 15 de junio de 2022. Fernanda Miño destacó: "Esto, sin el Aporte Solidario a las grandes fortunas, sería imposible lograrlo. Hoy tenemos ese recurso y lo queremos brindar en este proyecto para transformas esta realidad tan dolorosa. Ese aporte generó que podamos trabajar; me encantaría que quienes lo hicieron nos pudieran acompañar para ver cómo se transforma en que una familia pueda tener un techo digno, que pueda decir mi bebé no gatea más en la tierra”.
Finalmente, Miño señaló: "El hacinamiento crítico es lo que más nos impulsó a generar esta nueva línea para poder comprar terrenos, también la violencia de género. Hoy, quienes sufren esta situación no pueden dejar su casa porque no tienen donde ir. Frente a esta necesidad imperiosa, ya veníamos generando suelo urbano, pero queremos profundizarlo y hacerlo de manera más acelerada".
