La actriz y directora de doblaje argentina dio un pantallazo de la situación del oficio en la actualidad y la necesidad de entenderlo como un servicio social que garantiza accesibilidad.
Silvia Aira es actriz y directora de doblaje, docente del ISER y autora del libro Doblaje: sugerencias para el aprendizaje del oficio. “El libro surgió de mi posibilidad de empezar a enseñar este oficio, porque lo que pasó históricamente y en todas partes de latinoamérica es que este oficio se transmitía yendo a escuchar a los que sabían”, explicó la actriz. De esta forma rescató que al estar el oficio institucionalizado públicamente a través de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA), era necesario crear materiales que introduzcan al oficio para apuntar a la creación de un material de calidad.
Silvia contó en comunicación con En órbita, que en argentina está promulgada una ley que contempla la regulación del oficio desde 1986, “imagínense la tecnología en ese momento y la mirada sobre los medios audiovisuales en ese momento”: Sin embargo no fue hasta 2013, en el marco de la implementación de la LSCA, que la normativa se implementó y se abrió la espacialización en Doblaje y actuación de la voz. Desde este espacio están “en esa lucha de rescatarla (la ley), modificarla y además federalizar”, para que contemple las nuevas necesidades del oficio y se enmarque en una perspectiva de derechos.
En este sentido, la actriz destacó que si bien existen muchos prejuicios en torno al doblaje y a la actuación de voz relacionadas con viejas formas de trabajo, es necesario garantizar el doblaje de los materiales para garantizar la accesibilidad de los mismos.
“Uno puede preferir el idioma original y de hecho tiene la opción, pero no podemos dejar de lado que también las audiencias tienen derecho a ver el material doblado porque es un servicio social y cultural y porque hay personas con condición nula o muy reducida o niños y ancianos que necesitan el doblaje y necesitan recibir un material doblado con calidad. Desde ahí es que apuntamos a mejorar este servicio, pensándolo también como un servicio social de acceso a materiales que de otro modo sería muy difícil para muchas personas”, detalló.
Construir desde lo compuesto
El doblaje latino es un lenguaje que la gran mayoría de las personas tiene incorporado a través de los consumos culturales. Ya sean animaciones, novelas, publicidades o cualquier producto audiovisual, “nosotros recordamos un personaje por la voz del español neutro no la del actor original y si lo escuchamos del actor original quizás nos suene ajeno”.
La construcción de un personaje desde la voz requiere habilidades actorales, de locución e interpretación. Silvia subrayó principalmente este último aspecto ya que el doblaje “es una reinterpretación de la actuación que ya hizo otra persona, o una animación, hay alguien que ya actuó y uno tiene que fusionar su actuación con ese cuerpo. Hacer algo creíble entre dos personas y que el espectador pueda creerse ese personaje”.
La actriz, que cuenta con 25 años de carrera y un repertorio variopinto que incluye el doblaje de actrices como Meryl Streep, Fiona Shaw o series infantiles como Dientes de lata y Power Rangers Fuerza Mística, destacó que no solo se trata de reinterpretar desde la actuación sino tambien entender los aspectos de que llevaron a la voz original y como “traducirlo”.
“La actuación tiene que ver con hacer una reinterpretación. Al pasar a otro idioma hay rasgo prosódicos, semánticos, culturales, de la forma de hablar que hay que “traducir" en ese momento en el que uno actúa. Digo, un gesto , una expresión, un llanto, un susto de una persona en china seguramente va a ser diferente a nuestra forma de reaccionar y como estamos hablando en español tenemos que reinterpretar ese estado, esa emoción, para que sea creíble en español. Esto es casi un proceso inconsciente que lo da el trabajo en el oficio”.