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Tras las huellas y sonidos del pueblo ava guaraní

Soledad Morales vive en la capital salteña. Investiga, aprende y difunde junto con comunidades originarias de la provincia el universo cultural ava guaraní. Junto con sus estudiantes y sus hijos e hijas produce programas radiales que llevan el nombre de “Oñemama”, que quiere decir “entrelazarnos”.

Soledad nació en el Tabacal, bien al norte en el departamento de Orán (Salta), territorio de comunidades que durante mucho tiempo fueron nombradas despectivamente chiriguanos. "Nosotros tenemos en la zona del norte, más o menos cuatro horas de Salta capital hacia el departamento de Orán comunidades guaraní y también tenemos en Salvador Mazza, que ya vendría a ser uno de los límites con Bolivia. En la ruta del ramal 34 de Jujuy también encontramos  otras comunidades hablantes del idioma guaraní como tapiéte, y también hay otra variedad de guaraní que vendrían a ser los timba. También hay simba-guarani, hay ava, los chané también están guaranizados a través de la lengua, ellos hablan idioma guaraní. Y en Bolivia hay muchos pueblos más que lo hablan también", expresó en diálogo con Futura en casa.  Si bien ella vive hace muchos años en la capital, viaja a su lugar de origen donde vive su familia. Allí también hizo contacto con una comunidad que se encuentra en Pichanal.

¿Cómo vivís esos viajes a tu lugar?

Fui en época de carnaval. Pero si bien es una celebración con lo que nosotros conocemos como carnaval, los preparativos del Arete Guasu, que vendría ser la fiesta grande del guaraní, comienzan a finales de noviembre, diciembre. Ya comienzan los preparativos porque empezaba en esa época a florecer la flor amarilla, flor de carnaval o tapairihua, esa era una de las señales naturales y comenzaban. Debo decir que el Arete Guasu es una época muy importante porque es la comunión del guaraní con todo: con sus ancestros, con los seres del monte, con la familia. Cada parte de la familia guaraní tiene una función para hacer en esa celebración que duraba mucho tiempo… mi mamá, mis tíos, recuerdan cómo se iban preparando ellos, como iban construyendo los instrumentos. Es una época de mucho sentimentalismo, porque recuerdan a sus abuelos. Yo lo he vivido y lo he podido sentir a partir de todo esto que aprendí con ellos. Llega esta época y trato de ponerme en contacto con mis ancestros específicamente. 

Lo que pasa es que yo soy de la zona en la que están, entonces yo escuchaba la música que tocaban en las épocas de febrero. Durante mucho tiempo trabajé con repertorio folklórico, digamos, folklore americano, de la riqueza del folklore en argentina también. Entonces decidí, era mi deseo, incorporar otro tipo de música para los chicos que me parecía igualmente importante para los niños, que tenían sus propias riquezas, sus propias razones de ser.

Arete guasu (Fiesta grande)

¿Cómo pudieron relacionar a una escuela capitalina y a su comunidad educativa con los saberes de los pueblos indígenas del interior?

Acá en Salta capital no hay comunidades guaraní, puede haber alguna familia. Tuvimos la suerte de que una persona, una mburubicha, que podría ser como un cacique, nos vino a visitar, es una persona sabia. Ella vino a la escuela y los fue acercando (a los estudiantes) a través de su relato y a través de todo el material que yo le iba presentando a los chicos los fue acercando hacia la cultura guaraní. Debo decir que en la escuela tenemos un museo étnico escolar, es el único museo en Salta étnico-escolar. Entonces la escuela de nosotros tiene esa característica y esa apertura hacia las culturas. Hay otras culturas, otras personas, otras naciones que trabajan con nosotros. Entonces, digamos, que no era algo que no podía suceder. Nosotros trabajamos mucho haciendo hincapié en el docente investigador. Acá en Salta, lo única cosa que subsiste musicalmente es el folklore, es muy difícil para el salteño tipo. Es folklore, es zamba y nada más. Ya cuando vos vas saliendo de la ciudad de Salta vas encontrando las copleras. Yo trabajé con un grupo de abuelos copleros y es un placer realmente hacerlo con ellos. Para mí es en esos espacios donde encontrarás la verdadera identidad de lo que es Salta. Para mí que vengo del interior. Aun yo no entiendo el tema del Señor y la Virgen del Milagro. Ese, es un tema grande, porque yo no lo entiendo totalmente. Para mí hay otras cosas. No puede ser la única cara de Salta esa.

¿Qué mirada sentís que predomina hacia las culturas originarias?

Construido y destruido. Estuve trabajando con Diego Szapari de Radio Upa, que fue el que hizo toda la edición de estos microprogramas (Oñemama). Cuando estábamos trabajando él me dice "vamos a necesitar fotografias, paisajes". Él tenía muy en claro, como yo, que no iba a presentar cerros. Cerros, ni los paisajes típicos de Salta, porque Salta también son las yungas, son otros paisajes. Nosotros fuimos criados cerca de los ríos, entonces es como que mamamos otras cosas y está muy bueno. Creo que este tipo de trabajos que visibilizan las diferentes caras de la cultura originaria tienen que estar jugando en primera. Pero bueno, si no hay una inversión a nivel socio-cultural, socio-educativo, socio-comunitario, no sé. No veo en esta situación que estamos pasando mundialmente, las naciones originarias, los pueblos están peor que antes. 

Es como si no fuera música, como si no fuera importante. Nos hemos acostumbrado a hacer réplicas y a repetir muchas cosas sin sentido, a veces la música se repite sin sentido. Por qué no nos fijamos de dónde viene, cómo fue transmitida, realmente no vemos a la personas y a las cosas que están detrás de este hecho musical. A mi me paso que yo no pude, no podía, comprender muchos elementos de lo que escuchaba porque no conocía el tema de la palabra, todo lo que tenía que ver con la palabra. 

Por ejemplo, yo no encontré... no pude comprar instrumentos. Lo primero que yo quise hacer fue comprar un instrumento, un tambor. Y no me lo querían vender, porque no son instrumentos para vender. Cada instrumento tiene su dueño. Encima que ellos ya no tienen monte, el monte disponible ya no está disponible. Son lugares que están privatizados, el tema del desmonte, del desborde de los ríos. Hay cosas que no están disponibles como nosotros pensamos, ese es el tema. El tema es ¿cómo vas a mirar lo que estás mirando? ¿cómo, de qué forma?

¿Qué lugar ha tenido Andrea Segundo en tus investigaciones sobre el pueblo y la cultura ava guaraní?

Fue inspiración y los niños aprendieron mucho a través de sus visitas. Les quiero contar que a partir de un trabajo de campo que hicimos junto a otra docente de la escuela. Como la escuela es jornada extendida, tenemos una materia que se llama Patrimonio Cultural entonces ellos empezaron a abordar la investigación desde Ciencias Sociales del pueblo guaraní, yo fui aportando todos los materiales que tenía y empezamos a trabajar con la danza, con los toques de los instrumentos y también desarrollando un cancionero donde tenemos canciones donde los niños van nombrando elementos. La parte de la cosmovisión del pueblo.  Este libro se llama “Siguiendo las huellas de Andrea”, eso fue un sueño de los niños, ver convertido todo su trabajo de campo y de investigación en un libro. 

Soledad y el libro que escribió con Andrea Segundo junto a una muñeca con vestimenta tradicional de las mujeres ava guaraní

Después empezamos a hacer la divulgación de este libro y en los niños siempre estuvo eso de conocer la comunidad de donde venía Andrea y la verdad que era algo, pensamientos y deseos que parecían muy lejanos. Empezamos a trabajar con los niños. Nosotros estamos en un barrio ya saliendo de la ciudad de Salta. Es una escuela que tiene niños de diferentes recursos: con bajos recursos económicos o medianos nada más. Empezamos a trabajar con las familias , siempre con su apoyo, en cuanto queríamos que vaya la mayor cantidad de niños. Hicimos muchas actividades; vendemos empanadas, ropa, hicimos de todo. Con mucho apoyo del equipo directivo, de mis colegas. Y concretamos un viaje..llegamos a Pichanal. Nosotros hicimos un proyecto en donde los niños iban a trabajar elementos desde otras áreas de conocimiento porque fuimos docentes de arte, el directivo y otra docente más.

Músico con flauta tradicional

Llegamos a la comunidad, fueron recibidos por los chicos, les hicieron carteles en idioma guaraní. La verdad que los niños de la comunidad estaban muy sorprendidos, porque ellos no podían creer. En alguna oportunidad mis alumnos cantaron canciones que ellos ya conocían, con los que trabajan los profes bilingües de la comunidad. Fuimos a recorrer el pueblo, fue una experiencia de mucha alegría. Sus miradas, sus ganas de participar, de mostrar lo que ellos habían aprendido. 

Esos niños ahora están en séptimo grado, el año pasado viajamos a finales de octubre. Estuvimos participando, los chicos tocaron los instrumentos, cantaron. Hay una de las cosas que con el tiempo adquieren otras dimensiones. Por ejemplo, nosotros hicimos como un conversatorio donde trabajamos con un grupo de niños de ahí y un grupo de nosotros, de los niños que llevamos de capital, y los niños presentaron el libro. Muchas veces en las comunidades, los niños no dimensionan el valor de su propia cultura, eso fue lo que nos paso. Había chicos que no la conocían a Andrea… Todo el trabajo que Andrea desarrolla por su cultura, por su nación, lo hace por fuera de la misión y esto pasa en muchos lugares, no solamente pasa con Andrea aca en Salta. Entonces esto fue para ellos como un descubrimiento y ahí nos acompañaron otro abuelos.

Esas comunidades  fueron muy marcada por la explotación obrera  por parte del Ingenio El Tabacal, como refinería de azúcar…

Sí, esta comunidad , en este lugar que se llama Pichanal, en realidad estaba en una zona que se llama La Loma en el ingenio El Tabacal. Imagínense todo lo que tiene que ver con el trabajo esclavo del ingenio, las vidas cobradas por el ingenio de los pueblo nativos del lugar. Ellos fueron expulsados de La Loma, hay mucho trabajo para leer sobre eso. Andrea Segundo nació en la Loma y llegaron junto al padre Roque Cheri, que también hay muchas lecturas de esto porque la misión se hizo muy conocida por el padre. Y hay muchas voces a favor y en contra de él. Él fundo la misión franciscana, este espacio no tenia monte. Este fue un espacio donde ellos no pudieron seguir desarrollando las actividades que ellos hacían para vivir. Actividades esenciales para vivir. Entonces de ahí hay  que  hay mucho para decir.

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