La pieza está inspirada en el libro que el periodista uruguayo escribió durante su encierro en un calabozo bajo tierra y está dedicado a su amor de la adolescencia. Al cumplirse 10 años de su estreno, se vuelve a presentar este domingo en el Espacio Alihuen.
El escritor, dramaturgo y periodista uruguayo Mauricio Rosencof, escribió en un calabozo bajo tierra y en hojas de armar cigarrillos una historia de amor, que se salvó dentro de los dobladillos de las camisas para lavar que una vez por mes recogía su familia. Cuentan que para escribir estos poemas, consiguió una lapicera canjeándola al guardia por la escritura de cartas de amor dedicadas a la novia de un sargento. Algunas de sus poesías fueron musicalizadss por Jaime Ross, quien inspiró a la Compañía platense “Golondrinas de Yeso” a interpretar y musicalizar la historia de “La Margarita”.
“El espectáculo nació en el patio de La Carpintería –espacio cultural entonces ubicado en 16 y 64- charlando de sueños y deseos”, contó Nico Marini. “Luego descubrimos el libro de Rosencof y a partir de ahí comenzamos a pensar en cómo armar esa historia de amor adolescente, que tiene la magia de lo sencillo y que nació en un calabozo bajo tierra”, completó Juan Rossi.
Una década después de su estreno, la Compañía “Golondrinas de Yeso”, en el marco de los 40 años de democracia en Argentina, vuelve a poner a en escena esta historia de amor contada en 25 sonetos. “En un contexto muy particular, sentimos la necesidad, hoy más que nunca de cantar por los chiquitos que faltan, por los chiquitos que vienen”, contó Rosario Palma sobre el regreso a escena de una obra comprometida y profunda.
Mauricio Rosencof es un escritor, dramaturgo y periodista uruguayo nacido en 1933. Luego de una intensa actividad política se convirtió en dirigente del Movimiento de Liberación Nacional –Tupamaros. En 1972 cayó en una emboscada y es brutalmente torturado y apresado en el penal de Libertad. Tras el golpe militar de 1973 es confinado en una celda de dos metros por uno sin contacto con el exterior tomado como “rehén” por las fuerzas armadas. En 1985 es liberado como consecuencia de una amnistía general. Escribió clandestinamente en ese contexto de encierro, entre otras cosas, esta serie de sonetos inspirados en su amor de la juventud.
La obra se presenta el domingo 17 de septiembre a las 20hs en Alihuen (5 e/ 69 y 70)
“Rosencof estuvo doce años secuestrado por los militares uruguayos y a partir de escribirle poemas a la mujer del sargento, a quien se jacta de conquistar en tres poemas, logró algunos favores mínimos con los guardia cárceles, que le pasaban unos papelillos para armar cigarrillos y una lapicera. Así pudo escribir toda ´La Margarita’, y otras cosas que las sacó luego en el dobladillo de la camiseta”, repasa Rossi. Y agrega que “de las cosas que fueron más complejas para pensar, fue dar cuenta del contexto en el que fue escrita la obra. No encontrábamos la manera de relatar esa historia, hasta que surgió la posibilidad de entrevistar a Rosencof, y ahí comenzó a involucrarse todo ese contexto y le dio un cierre al espectáculo”.
La Compañía Golondrinas de Yeso propone de este modo un viaje por la memoria en un concierto-espectáculo, atravesado por la música, el teatro y la poesía. “Se trata de un espectáculo que dialoga constantemente con la música, el recitado, el teatro y la plástica, un evento artístico distinto, o por lo menso poco convencional”, explica Rossi.
“A lo largo de los años la obra se fue armando a partir de una construcción colectiva. El camino comenzó con la música, después apareció el libro, después apareció Margarita, la actriz, el director, la escenografía, el vestuario, el diseño de las luces, la entrevista a Rosencof, las proyecciones, todas cosas que surgieron desde el entusiasmo y el compromiso con la obra”, expresa Palma.
La Compañía Golondrinas de Yeso está integrada por los cantantes y músicos: Nicolás Marini, Rosario Palma, Juan Rossi, Gerónimo Acuña y Santiago Oñate. Mientras que el Vestuario y la escenografía están a cargo de Agustina Bianchi, el diseño de luces, corresponde a Agustina Bianchi y a Santiago Saracca, mientras que el sonido es de Yamil Gelené y el diseño gráfico de Rama Galeliano. La obra está bajo la dirección de Santiago Saracca.
“Pasan los años y es una historia que no deja de conmovernos”, señaló Marini a Cacodelphia. “La obra a todos nos puso en otro lugar, nos abrió un camino para encarar nuestros proyectos personales”, dice Palma y Rossi completa que “la gran metáfora es quien resistirá cuando el arte ataque, porque sacar de ese pozo una historia de amor y que este vigente hoy en día, es un mensaje realmente muy fuerte”.