El presidente lleva casi un año de gobierno en medio de marchas opositoras que fueron contestadas con otras en respaldo a su gestión y a la reforma de salud, laboral y de pensiones que presentó al Congreso.
“Ellos (los que están en contra) empiezan a poner a trabas a las reformas sociales que son la columna vertebral del programa del ‘Pacto histórico’, desde el momento que Petro dice ‘si no hay forma de pactar con los partidos conservadores y liberales, entonces no tienen nada que hacer en las carteras', y los fue sacando de los ministerios”, describe Diana Alfonso, historiadora y militante de la Unión Patriótica de Colombia en Argentina.
A partir de las manifestaciones de apoyo popular se destrabaron algunos debates en el Congreso, relativos a la reforma de salud, laboral, agraria y pensional. Lo que es muy importante para el país porque es una deuda de los diálogos de paz desde el 2006 y las FARC. Sin embargo los proyectos presentados por Petro quedaron empantanados en la discusión parlamentaria.
“Estamos en un buen momento para clarificar la posibilidad de paz total de nuestro país. En ese momento aparece el ala guerrerista de la ultraderecha para asediar, eso fue lo que pasó antes del 7, describe en charla con Los Mundos Posibles.
Alfonso considera que “el 7 reafirma la hoja de ruta, en el momento donde se busca codear la reforma pensional, es un pasivo histórico en la agenda colombiana, básicamente las pensiones quedaron en manos de agentes privados, mucha gente ha perdido 10 años de su aporte”.
"Lo que propone Petro es que se convierta en un sistema de salud que se base en un modelo preventivo, es decir antes que ocurran las epidemias, las pandemias, previo a que eso suceda tiene que haber seguridad, infraestructura”, amplía.
Asimismo diferencia la situación colombiana con lo sucedido en Perú: “Petro habló del caso de (Pedro) Castillo, estando seguro de que a nosotros no nos puede pasar en tanto nos mantengamos en las calles, el pueblo colombiano tiene que refrendar constantemente su decisión de transformación a través de la organización y la movilización popular”.
Sobre los desafíos que se le presenta al país, sostiene que “se viene una protección anti-lawfare que tiene que ser refrendada por la población en las calles, por ejemplo la procuraduría, otro estamento favorable al uribismo hace décadas, ha estado investigando pequeñeces de parte los congresistas más importantes del ‘Pacto Histórico’, esto lleva muchas encrucijadas”.
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