El 7 de abril la Sala N°II de la Cámara de Casación Penal revocó un fallo de primera instancia y absolvió a Mariana Gómez, quien había sido condenada por los delitos de resistencia a la autoridad y lesiones leves en el 2019 a dos policías de la ciudad. El hecho sucedió en 2017 cuando Mariana fue detenida luego de verla con su esposa Roció Girat.
“Para nosotras la verdad es un triunfo de todo el colectivo, de toda la lucha, de estos cuatro años de tortura judicial. Realmente es un logro la absolución de Mariana. Lo vivimos con mucha alegría y a su vez pedimos que estas situaciones no vuelvan a pasar. Ni a nosotras, ni a nadie más. Nadie debe ser discriminado ni por su orientación sexual, ni por su expresión de género, ni por cómo es. Realmente esta situaciones no deberían suceder”, contó Roció Girat, esposa de Mariana Gómez, en comunicación con En Órbita.
El viernes 28 de junio de 2019 el Tribunal Oral Federal N° 6, presidido por la jueza Marta Yungaro, dictaminó una pena de un año. Este año, la defensa apeló el fallo y la Sala II de la Cámara de Casación Penal, integrada por los jueces Horacio Días, Eugenio Sarrabayrouse y Daniel Morín, revocó el fallo de primera instancia. “Los jueces le dieron lugar a hablar a Marian. Dieron lugar, por primera vez, de exponer a los amicus que se habían presentado desde la primera instancia. O sea, fue una audiencia muy buena de la cual esperábamos buenos resultados”, detalló Rocío. Sin embargo, señaló que “vemos como los jueces y las juezas que están, actúan y fallan como piensan. Esa es su línea, no fue casualidad la condena hacia Marian, no fue casualidad todo lo que sucedió. Realmente fue un mensaje a toda la comunidad, un mensaje adoctrinante, un mensaje desafiante”.
“La verdad es que nosotras en ese momento estábamos siendo lesbianas visibles en nuestra expresión y para estas personas nos estaban observando. (...) Nosotras nos estábamos retirando del lugar. Eso quedó demostrado: que el accionar fue ilegítimo. Por eso Marian también fue absuelta, porque también quedó demostrado que fumar en un espacio semiabierto no es motivo para que venga un policía y te lleve detenido”, recordó Roció, quien también se encontraba en el lugar cuando se llevaron detenida a su compañera. “nosotras éramos en ese momento, paradas en el domo de constitución, las únicas dos lesbianas que estábamos fumando igual que todas las personas que estaban alrededor y sin embargo la mirada no fue para todos. No fue para la pareja heterosexual que estaba delante de nosotras haciendo lo mismo que estábamos haciendo nosotras. Fue hacia nosotras y fue sobre todo hacia Marian”:
Rocio contó que presentarán cargo por violencia institucional para “que estas personas no estén más ocupando sus espacios, que logremos de manera colectiva que el estado en sí se capacite”, “realmente da fruto cuando nos organizamos, cuando nos hacemos visibles, cuando nos manifestamos en contra de algo que como sociedad rechazamos que es la discriminación”.
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