Organizaciones sociales marcharon en reclamo de partidas de alimento para comedores comunitarios. La jornada terminó con un fuerte accionar represivo contra los manifestantes. El Gobierno Nacional celebró el operativo.
“Fue ejército que avanzó contras las organizaciones sociales, las columnas que estábamos ahí, estaban preparados como para ir una guerra ante trabajadores desocupados, que lo que hacíamos era reclamar que se restituyan los alimentos, desde el mes de diciembre, han quedado 45 mil comedores populares”, describe Edgardo Mari, referente de la mesa nacional del Polo Obrero.
La movilización de organizaciones sociales llegaba de forma pacifica hasta las oficinas del Ministerio de Capital Humano, sobre avenida 9 de Julio, en reclamo de la reapertura de partidas de alimento para los comedores populares. Sin embargo, Policía de la Ciudad comenzó a disparar y desató una represión que dejó heridos y detenidos.
Sobre cómo empezó el ataque de las fuerzas de seguridad, Mari detalla que “sin ningún aviso del comisario a cargo del operativo, del estilo ‘les damos diez minutos, liberen’, amaron el cordón de Infantería con todo lo que se vio, tirando gases, con escopetas, desde las motos tirando con perdigones de goma, fue una brutal represión”.
“Avanzaron con la represión, con una intención clara de lastima y dañar, tenemos muchos compañeros con las balas de goma impactadas en la cara, yo de hecho tengo en el oído. No es que querían disuadir, que apuntaban a las piernas, hay muchos heridos en la cabeza, en el cuello”, relata.
Al cierre de la entrevista, el dirigente del Polo Obrero fue crítico del rol de la CGT “porque en cuatro meses de gobierno solo convocaron a un ‘parito’ de 12 horas, no hacen nada, no pueden estar mirando para otro lado en cuadro de despidos masivos con represión, son cómplices, por eso le estamos exigiendo que llame a un plan de lucha”.
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