Mi casa soy

por Myrna Renaud

Mi casa hoy
La artrosis concluye en psoriasis.
La pudenda y los sobacos se quedan calvos.
El bigote desaparece.
La barba aflora.
Los cueros de la barriga se distienden.
Los músculos se encojen.
La voz tiembla.
Los dientes se pudren.
La cabellera y las cejas se tornan blancas y ralas.
Los pensamientos se detractan.
Las ideas se cruzan.
Todxs dicen que el movimento contribuye a la prevención de los malestares de la tercera edad y que el ejercicio causa bienestar físico y psicológico.
Vale. No he parado de bailar, entonces, ¿por qué se pone tan fea la casa?
Menos mal que la sabiduría expande el tiempo de la requedada y que los sueños se tornan realidad.

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