La editorial platense Mil botellas publica por primera vez en el país el libro "Las mañas del zorro", que recorre la vida y los escritos del mítico escritor mexicano.
La Editorial Mil Botellas publicó por primera vez en Argentina “Las mañas del zorro”, la biografía más completa sobre el magistral escritor mexicano Juan Rulfo. La autora es Reina Roffé, escritora, periodista y docente argentina, radicada en Madrid y estudiosa de la vida de Rulfo.
Publicada originalmente en España en 2003, Las mañas del zorro enlaza las partes sensibles del gran escritor: la infancia y su México convulsionado, la muerte del padre, los relatos de su tío Celerino, el amor con Clara Aparicio, así como también la espera eterna de la nueva obra que nunca llegó. Este libro forma parte de la colección Maridaje del sello platense. “Es una invitación a recorrer esos vínculos entre lo literario y el tema de la tierra y la revolución mexicana. Es una biografía muy completa, una invitación a la lectura y a viajar por la vida de los personajes que pueblan la obra de Rulfo y su realidad”, dice el editor y escritor Ramón Tarruella.
Reina Roffé nació en Buenos Aires, es narradora y ensayista. Su obra incluye las novelas Llamado al puf (1973), Monte de Venus (1976), La rompiente (1987), El cielo dividido (1996), El otro amor de Federico. Lorca en Buenos Aires (2009) y el libro de relatos Aves exóticas. Cinco cuentos con mujeres raras. Y uno más (2011). Entre otros ensayos, ha publicado Juan Rulfo: autobiografía armada (1973) y los libros Conversaciones americanas (2001) y Voces íntimas. Entrevistas con escritores latinoamericanos del Siglo XX (2021).
“En esta biografía todo el tiempo encontramos la presencia muy latente de lo que es la Revolución Mexicana, la vida y la obra de Rulfo, esa especie de trilogía que la autora trabaja de manera muy exhaustiva”, cuenta el responsable de la editorial platense. “Rulfo tiene dos trabajos editados: el libro de cuentos ‘El llano en llamas’ y la inmensa novela´Pedro Páramo´. Ambas obras están compenetradas con la revolución mexicana, el campesinado y la temática de la tierra. Y, en este trabajo, la autora se mete con esos temas que están muy presentes en la literatura del escritor”, relata Tarruella.
Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, más conocido como Juan Rulfo, nació en México en mayo de 1917. Fue un escritor, guionista y fotógrafo, autor de dos obras magistrales -El Llano en llamas (1953) y Pedro Páramo (1955)- que fueron publicadas en todos los idiomas y por las cuales es considerado uno de los escritores hispanoamericanos más importantes del Siglo XX. Luego de esos dos grandes trabajos literarios no volvió a publicar. Reina Roffé, en Las mañas del zorro, aborda todas las etapas vitales y creativas del autor con una mirada desmitificadora, buceando en esas zonas oscuras y misteriosas de su personalidad.
“En el trabajo no aparece la figura del escritor consagrado, sino más bien, la de un autor atravesado por algunos temores y algunos silencios, que la autora de manera cronológica y a partir de varios testimonios intenta descifrar. De ese modo ensaya algunas respuestas a por qué Rulfo dejó de publicar, por qué sembró su biografía de pistas falsas y cómo se situó respecto de los autores del boom latinoamericano. En ese recorrido da cuenta de la persona que hay detrás del escritor”, repasa en diálogo con Cacodelphia. “Ese niño que vivió la Revolución Mexicana, el vinculo con su padre, su abuelo, sus amores, la relación con Clara Aparicio, el vinculo entre ellos, y los cruces con Onetti, con quien tuvo una relación muy amigable, Carlos Fuentes, Octavio Paz y todo ese entorno impresionante que mantuvo con el mundo literario, paradójicamente, sintiéndose ajeno a ese mundo. Todo eso le lleva tiempo a la autora y recorrido al lector”, agrega.
Al ser consultado sobre los motivos por los cuales Juan Rulfo no volvió a publicar, el escritor y editor, asegura que el mundo de los escritores es completamente personal y subjetivo y recordó una charla con Jorge Zuhair Jury, escritor, guionista y director de cine, quien también forma parte del catalogo de la editorial. “Alguna al preguntarle si estaba escribiendo algo, me respondió que ya no tenía más nada por contar. Y quizá, ese también, haya sido el vínculo de Rulfo con lo literario, es decir, lo que tenía para contar lo había contado en esos dos libros publicados y luego ya no tuvo más nada por contar. Algo similar paso con Salinger, escritor estadounidense, conocido principalmente por su novela ´El guardián entre el centeno´, que se convirtió en un clásico de la literatura moderna y luego de esa publicación casi que no volvió a publicar más nada”, rememora.
El boom literario
El boom latinoamericano fue un fenómeno literario, editorial, cultural y social que surgió a comienzos de los años ‘60, cuando diferentes obras de novelistas latinoamericanos, como Gabriel García Márquez, Julio Cortázar, Mario Vargas Llosa y Carlos Fuentes fueron ampliamente distribuidas en Europa y en todo el mundo. Cada uno de ellos uso el realismo mágico y sus recursos vanguardistas para contar diferentes historias y explicar los hechos políticos, económicos y sociales por los que atravesaba Latinoamérica en ese entonces.
“Juan Rulfo, con su forma de escribir, con esa prosa llana, sensible, sencilla y muy compleja, es el que marcó toda una línea literaria en esos escritores que formaron parte del boom latinoamericano, casi qué diría que fue el padre de todos ellos. La novela ‘Pedro Páramo’, a pesar de ser una novela corta, es muy compleja y mucho de esa complejidad de lo sencillo, van a tomar aquellos escritores”, señala y argega que “además, todos ellos descienden de William Faulkner, el escritor vanguardista que marcó a todos a partir de la ruptura con el lenguaje”.
“Con respecto al realismo mágico, la mejor definición la dio Tizón, quien alguna vez dijo no saber que es en realidad el realismo mágico, pero, recordaba que cuando se iba a dormir su abuela le decía: ´vamos a aplaudir para espantar las víboras y los fantasmas que están debajo de la cama´. Y entonces él se iba a dormir pensando que eso era realidad. Cuando toda esa historia la llevó al cuento, todo eso era parte de una creencia del lugar, no era surrealismo. De ese modo explicaba el realismo mágico el escrito jujeño y es una buena definición, porque da cuenta de la reproducción de ciertas creencias que existían, que no eran una invención, no eran fantásticas, era un realismo con elementos mágicos”, expresa.