Luego de tres días en que más de 70.000 personas coparon las calles de Bariloche-Furilofche, se eligió la sede del 37° Encuentro ante la grave situación social y política que atraviesa la provincia.
Este 14, 15 y 16 de octubre se llevó adelante el 36° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Trans, Travestis, Bisexuales y No Binaries. Dos de las cuestiones que más atravesaron el encuentro fueron las luchas de los pueblos originarios, como la defensa de los territorios y el repudio al extractivismo y el rechazo al avance del fascismo, a una semana de las elecciones presidenciales en el país. La sede de Bariloche-Furilofche, había sido elegido luego de que el 4 de octubre del año pasado siete mujeres junto a sus hijxs, fueran detenidas y trasladadas a Ezeiza, luego de que el Comando Unificado de Fuerzas Federales de Seguridad reprimiera la comunidad Lafken Winkul Mapu de Villa Mascardi. La represión se dio durante el encuentro que se celebraba en San Luis y tuvo como resultado la renuncia de la ex ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación, Elizabeth Gómez Alcorta.
Al cierre del encuentro, se eligió Jujuy como sede del próximo año. "Parte de los acuerdos que había habido el año pasado era que cedían su lugar para que sea Bariloche por lo que había sido la represión. Pero que ahora están dadas las condiciones para hacerlo en repudio a lo que fue la represión de Morales y las situaciones que se viven ahí. Hubo una presencia fuerte en el acto de apertura de una comitiva muy grande del Tercer Malón por la Paz que también subió al escenario cuando finalizo la lectura del documento", explicó Corina Duarte, periodista de Radio Estación Sur en comunicación con Radio Futura.
Con 112 talleres que conformaron la columna vertebral del Encuentro, este año la discusión estuvo atravesada por la lucha territorial de los pueblos originarios y el avance fascista en el clima electoral (el taller donde se abordaron estos temas tuvo que dividirse en 5 subcomisiones). Durante la apertura, desde la Comisión Organizadora advertían cómo el patriarcado atraviesa todas las luchas: "No solo los cientos de conflictos territoriales y de resistencia contra el avance del extractivismo y el saqueo de nuestros recursos naturales, sino la lucha contra la violencia y discriminación sufrida dentro y fuera de las comunidades, femicidios y desapariciones de hermanas que no se visibilizan. Sabemos bien que en la unidad de nuestra diversidad, seguimos haciendo historia".
Se trata del tercer Encuentro que se hace en Bariloche-Furilofche. El primero de ellos en 1999 y el otro en 2011. Este es el primero que se da luego de los debates en torno al cambio del nombre y el carácter político del mismo: nombrar a Furilofche fue una conquista lograda de 2011 a esta parte. También se trata del primer Encuentro unificado desde que el movimiento plurinacional comenzó a dar batalla por su reconocimiento: las discusiones que se amplificaron en Trelew en 2018 habían logrado el año pasado dos encuentros paralelos en la Provincia de San Luis. En la provincia de Rio Negro, 162 comunidades mapuche están en conflicto por la tierra y fueron parte de la unificación definitiva de la Comisión Organizadora.
"Se esta reconfigurando la agendas de los feminismos y creo que el Encuentro no quedó al margen de eso en cuanto a la cantidad de personas que fueron, en cuanto a los debates, en cuanto a las instancias de participación", señaló Corina. "Creo que va muy de la mano de las agendas publicas la participaciones también, cuando hay debates que son prioritarios en al agenda social, en la agenda publica, en la agenda política", agregó.
Desde el discurso de apertura ya se advertía: "llegamos a este Encuentro en una Argentina donde el 42% del pueblo vive bajo la línea de la pobreza. 18,5 millones de personas, en especial las mujeres y disidencias; vivimos en condiciones de pobreza, víctimas de hambre, ajuste, devaluación y entrega”. También se resaltó la falta de acceso a la justicia ante la violencia machista, se repudió el atentado a la vicepresidenta y a toda violencia contra militancias políticas. En este sentido, se reivindicó la lucha de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo al grito de “son 30.400 y fue genocidio” y se denunció los bajos presupuestos en salud y educación, entre otras demandas.
Jujuy fue sede del 21° Encuentro Nacional de Mujeres cuando pedÍAN por la liberación de Romina Tejerina.
La marcha de cierre del Encuentro contó con la participación de 70.000 personas que marcharon por más de 4 horas atravesando la ciudad que se veía colapsada por la presencia también de grupos turísticos tradicionales y contingentes de egresados. Si bien fue menos multitudinaria que otros años, Corina contextualizó que "en la historicidad de los encuentros debe haber sido algo que ha pasado. No creo que sea una etapa nueva, sino que tiene una historicidad que está un poco ahí que, cuando vas renovando reclamos, acuerdos y estrategias comunes, la participación va aumentando o no. A esto se le agrega lo plurinacional, lo disidente que esta muy presente".
El año que viene estos acuerdos seguirán debatiéndose y renovándose en Jujuy, provincia que fue sede del encuentro en 2006 cuando reclamaban por la libertad de Romina Tejerina. En esta ocasión, propusieron que el 37° Encuentro Plurinacional sea en jujuy "luego del jujeñazo para acompañar la lucha contra la reforma constitucional de Gerardo Morales".