Falta de inversión, deterioro y promesas de reactivación incumplidas completan el cuadro de situación que genera descontento hacia el interior de la fábrica naval.
Micrófono abierto a les trabajadores entrevistó a Juan Marcelo Román, delegado del Sector Carpintería y Plástico del Astillero Río Santiago, para conocer el presente de este astillero emblemático en la región, una fábrica con una historia de largas luchas contra la privatización, y una de las que se puso a la cabeza del reclamo obrero a la gestión de Gobierno anterior: “Cuando salimos a la lucha contra Macri y Vidal fue durísimo, pudimos contagiar y unirnos a muchos sectores de trabajadores, incluso a nivel nacional, llegó un punto donde los sindicalistas decían que el Gobierno nos tenía miedo, que Macri y Vidal habían empezado a ser odiados por la gente”.
“En ese momento planteamos que teníamos que conseguir los insumos y el dinero necesario para financiar la construcción de las (embarcaciones) venezolanas, planteábamos continuar con esa lucha cuando se sentaron en la mesa con el Gobierno”, señala el entrevistado a la hora de describir el escenario de transición que se asomaba como posibilidad ante las elecciones 2019, y agrega: “Se reunieron en la Pastoral Social y nos dijeron que había 2019, incluso salió un video de Kicillof prometiendo que se iba a reactivar el Astillero, que esperemos, que los sacábamos con el voto y lo íbamos a reactivar”.
Para Roldán, el triunfo de Axel Kicillof en provincia y la transición no marcaron una diferencia sustantiva respecto de la gestión anterior: “A tres años de este Gobierno, con todo el aparato a favor de los representantes sindicales, no hemos podido abrochar un trabajo, no hubo ningún tipo de inversión, estamos peor, de qué sirvió unirnos con la CTA, la CGT, el Gobierno, los intendentes de Ensenada y Berisso, si hoy nos encontramos con que no hay trabajo”.
Al cierre de esta entrevista, el delegado concluye que “en Astillero hay mucha gente de trabajo, con una mano de obra impresionante, y muy abnegados, se trabaja en las peores condiciones imaginables y los trabajos salen igual, es gente muy capaz y trabajadora, acá el problema está del lado del Estado, que es el patrón, y de los diferentes manejos que han hecho políticos y sindicalistas con la empresa”.
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