A través de un comunicado la Obra del Padre Cajade busca visibilizar el estado de situación angustiante en que se encuentran los jóvenes en la región.
El suicidio de un joven que participaba activamente en la Obra del Padre Cajade agudizó la necesidad de las organizaciones de exponer la situación en que se encuentran las niñeces y juventudes de la región por falta de políticas públicas por parte del Estado. Marcos se llamaba el pibe que decidió quitarse la vida el 18 de julio.
El comunicado lleva las firmas de Casa Joven B.A.; Casa de los Niños Madre del Pueblo y La Pulseada Revista, donde coinciden en un punto crítico: "Se nos están yendo les pibes, a quien quiera oir, y a les que no también, a quien quiera ver, y a les que no también".
"La situación de Marcos fue el disparador, una situación que nos dolió mucho, Marquitos era un compañero. Transitó Casa Joven desde un lugar de tallerista , cantaba, hacía rap, les enseñaba a los pibes. Estaba muy presente, participaba mucho, y tenemos que dar cuenta de los que les está pasando a nuestros pibes, visibilizarlo", relató Chana Zarauza, educadora de Casa Joven.
Un fragmento del comunicado remarca: En medio de un derrotero de hambre, falta de trabajo digno, casas sin nada -pero nada-, las calles rotas, las zanjas llenas, las panzas vacías, el alma que deambula buscando un lugar que la aloje (...) Hubo una pandemia. Y todo quedó peor. Los gobiernos que no dan pie con bola para achicar el hambre y hacer crecer el trabajo con derechos. El mercado al que le importás una mierda, salvo que tengas plata para comprarle algo, o tengas la “buena presencia” que precisa para robarte la poca fuerza de trabajo que te queda.
"La pandemia nos atravesó a todos por igual, pero los sectores y los barrios que antes tenían poquito materialmente con la pandemia eso se agudizó mucho. Y lo que nos pasó como Casita, de construir vínculos, habitar espacios, eso se dificultó con un año de encierro y luego con restricciones. Costó que los pibes se vuelvan a apropiar de la casa, vuelva a habitarla como antes. Todo genera un contexto con mucha violencia, esta situación de ellos no está viendo nadie y por eso la visibilizamos", relató en Los mundos Posibles.
En su tramo final el comunicado pide soluciones urgentes:
DENUNCIAMOS lo que está pasando, ponemos en ALERTA al municipio, a la provincia y a la Nación. A los sistemas de salud, educación, justicia, seguridad, trabajo, vivienda, desarrollo comunitario, género, juventud y niñez.
PROPONEMOS políticas para la vida.
Desde nuestra organización, y con el abrazo de todas las organizaciones hermanas, con el corazón desgarrado y las manos prontas, las y los CONVOCAMOS A MIRAR LOS BARRIOS Y ATENDERNOS.
No hay mañana sin les pibes de hoy.
El hambre es un crimen.
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