Después del giro, su tercer trabajo discográfico, contempla una revalorización del tango del siglo XX.
Después del giro, de Gisela Magri, se podrá escuchar en todas las plataformas de streaming desde el 29 de julio. “Se trata de un disco bisagra en mi vida. Es un disco retrospectivo que hace una suerte de resumen musical autobiográfico sobre estos años de música y sobre este momento en el que me autopercibo además de cantora- como autora y compositora”, expresa Magri en Cacodelphia.
El repertorio de este nuevo trabajo, producido por Sinkunas y Magri, sintetiza los 20 años de carrera de la artista platense con el tango y se apoya – según explica- en los clásicos del repertorio, con versiones del nuevo cancionero del tango del siglo XXI y composiciones propias.
“Hace tiempo que vengo escribiendo y componiendo y cuando nos juntamos con Noelia Sinkunas todo eso se profundizó. Así surgieron las composiciones que me pertenecen y que forman parte de este trabajo y también las reversiones de los clásicos del género”, señala y agrega: “Creo mucho en los arreglos y en las recomposiciones como un lugar donde poder enhebrar esos mundos, donde poder juntar esas aguas. Y quizá la suerte de aliarnos y producir junto a Noelia, nos permitió interpretar, algunos clásicos desde esta contemporaneidad”.
Después del giro fue grabado en CABA y La Plata, en los estudios Sononimia, Fort Music Studio, Cuarto U y Mirifico entre 2020 y 2022. Y contó con la participación de Noelia Sinkunas (piano), Juan Martin Scalerandi (Guitarra), Milagros Caliva (bandoneón), y Julián Di Pietro (intervenciones digitales y diseño sonoro en Ir a cero, Yo no puedo ni decir y Después del giro). Además, contó con la participación de Julieta Laso (voz invitada en Pobre Flor - Primera ilusión) y Hernán “Cucuza” Castiello (voz invitada en Ella es así / La de Seguí).
“Se trata de un disco bisagra en mi vida”
“Creo que hace falta volver a reversionar y mirarnos en esos espejos del tango más tradicional porque realmente todavía no está todo dicho sobre el tango del siglo XX, y hay todavía, en ese repertorio, mucho por buscar”, dice Magri sobre la elección de algunos clásicos del género como “Nobleza de arrabal” (Tango de 1946. Letra: Homero Manzi / Música: Francisco Canaro) y “Besos brujos” (Tango de 1937. Letra y música de Alfredo Malerba y Rodolfo Sciammarella) que integran su tercer trabajo de estudio. “Estamos tan preocupados por legitimar lo nuevo, en construir otra mirada y romper con lo tradicional que no nos preocupamos tanto en generar esos vasos comunicantes entre aquel tango y este del siglo XXI”, completa.
Esa necesidad de buscar atravesar distintos mundos musicales y que convivan en sus discos, es parte del trabajo que viene realizando Magri en sus discos anteriores “Glicina oscura, tango y samba enredados” (2012) donde habla de alteridades musicales y “Madeja” (2016) donde trasvasa las fronteras de la tanguedad porteña, para proponer, una nueva deriva. “Siempre busqué transitar ciertas fronteras de los géneros y, experimentar, jugar y contar desde nuestros tiempos. Y la verdad que tengo ganas de seguir en ese camino y ver qué pasa con esas músicas tan masivas hoy, como son el rap y el trap, por ejemplo”, detalla.
“Creo que el tango debe dejarse atravesar por eso y atravesar o permear otros géneros con lo que tiene, sino se va a transformar para algunos pocos en un museo cool, en una música medio de culto y no quiero eso para el tango. Si es popular, si estamos tratando de atraer más público, tenemos que dejar muchos prejuicios de lados”, expone y resalta que “no todo el reguetón, el trap, el hip hop es de Sony. No todo es una porquería pre fabricada, no es todo fast food musical, no es todo ultra procesado, no es que todos son unos giles y nosotros somos los piolas”.
“Al tango contemporáneo le cuesta la fiesta y fue parte del carnaval, le cuesta reírse y si bien eso no lo perdió, si se dejó ganar por la solemnidad y el dramatismo, quizá por haber nacido en tiempos muy difíciles. Entonces para agrandar los públicos hay que saber interpelar desde otros estados, desde otros humores. Con mis canciones quise aportar a que todo no sea tan terrible y dramático”, concluye.