Investigadora, bloguera y escritora, presentó <i>Yegua</i>, una recopilación de relatos construidos a través de los años.
“Suele ser una descalificación hacia las mujeres, un insulto que alude a cuestiones que en la sociedad patriarcal están consideradas pecaminosas, feas, horribles. Nosotros lo hemos convertido en un motivo de orgullo”, contó Cintia Rogovsky sobre el título de Yegua, libro que publicó junto a Cuero y Pez Negro.
La idea surgió luego de hablar con Pablo Castro y Pablo Amadeo, quienes buscaban iniciar su proyecto editorial. Cintia, que se considera una lectora hedonista y una escritora irremediable, le acercó relatos que fue construyendo a lo largo de su vida. Una selección de ese primer material es el que hoy compone Yegua, donde los “modos de contar son los que nos permiten entrar o no a una historia”.
Cintia cuenta en su haber literario Palabras Cromáticas, un blog que comenzó como una ejercicio de escritura y poco a poco se convirtió en un espacio donde volcar las palabras que salen compulsivamente. “Hay una romantización del oficio de escribir y la verdad que es como cualquier trabajo. Implica un compromiso del cuerpo, tiempo, un determinado uso de espacio, cierta técnica. Por ahí lo que siento muy diferenciado es que, en lo que es narrativa, yo soy totalmente libre. No tengo ningún tipo de restricción más que el proyecto que esté haciendo”, contó en comunicación con Una Amiga Imaginaria.