La madre de una de las víctimas dijo que el acompañamiento y la cobertura periodística mermó pasado el primer momento del hecho. También señaló que se quiso hacer un uso político de la tragedia. La importancia del apoyo comunitario y las organizaciones sociales para direccionar el pedido de justicia.
El 20 de mayo de 2019 ocurrió la tragedia que marcó un antes y un después en la historia de San Miguel del Monte. En horas de la madrugada y bajo circunstancias que aún esperan aclararse ante la Justicia, dos patrulleros de la Policía Bonaerense persiguieron, dispararon e hicieron chocar al Fiat Spazio en el cual paseaba un grupo de jóvenes. Camila López (13), Gonzalo Domínguez (14), Aníbal Suárez (22) y Danilo Sansone (13) perdieron la vida a raíz del impacto, siendo Rocío Quagliarello la única sobreviviente.
Yanina Zarzoso, mamá de Camila, se enlazó vía telefónica con el aire de Los Mundos Posibles donde se explayó sobre el giró que trajo el hecho para la vida de Monte, el acompañamiento que recibieron los padres de las victimas de parte de la comunidad y las organizaciones sociales, y el uso político que se pretendió hacer de la tragedia: “Nos cambió la vida para siempre, pasa el tiempo y el dolor continúa”.
Para empezar, Zarzoso habló del acompañamiento que recibió durante esos primeros momentos que le siguieron a la tragedia: “Organizaciones sociales, todo el pueblo, gente de todos lados, familiares que atravesaron lo mismo que nosotros, después, con el paso de tiempo, uno empieza a sentirse mas solo, y después claramente siguen aconteciendo cosas y se pone el foco en eso, sabemos que del otro lado la gente sigue, pero a uno le gustaría que el acompañamiento siga siendo como al principio”.
Según lo explicó la entrevistada, el acompañamiento del Estado nacional fue mínimo y perseguía intereses políticos: “El Estado estuvo muy poco, los primeros días hubo un acercamiento, para mí, interesado, para la foto y después no están más, se siente ese abandono del Estado que tiene que hacerse cargo, me he encontrado muchas veces rechazando algo material y diciendo que yo no quería nada, sólo justicia y que no pase más”.
“Algo cambió para siempre, lo que pasó con los nenes fue de tan gravedad, nunca había pasado algo así, el pueblo despertó, ahora ante las injusticias, el hecho de empezar a salir a hacer marchas, la gente se moviliza por las injusticias, lucha por los derechos de cada uno, y entender que la forma de que no se vulneren es salir a la calle, hay más empatía en el pueblo, en Monte reinaba el silencio, todos tenían miedo, la Policía tenia mucho poder, y la gente prefería no meterse por miedo, lo que cambio es que ahora estamos detrás de ellos, ya no tienen tanta impunidad”, expresó la madre de Camila López.
“Yo me pregunto por qué, pero con el correr del tiempo fui aclarando mi percepción, me fui dando cuenta que no hay un por qué, lo hicieron porque la institución se maneja así, es un problema institucional, tenían mucho poder, hacían lo que querían, lo hicieron porque se manejan siempre de esa manera y no es un caso aislado, pasa en todo el país, con el tiempo aprendí que es una cuestión institucional, más allá de la pregunta que como mamá me hago de por qué a mi hija”, dijo Zarzoso respecto al proceder que tuvo la Policía aquella madrugada.
A modo de conclusión, habló sobre la carga emocional que tiene el hecho y la importancia que tuvo la Comisión Provincial por la Memoria para encausar el reclamo de justicia: “El primer tiempo no sabia qué hacer, no podía confiar en nadie, sentía que todos me mentían, era una pesadilla de la que no estaba preparada para vivirla, el dolor de perder un hijo, y frente a esa situación tener que pelear contra la policía y contra el Estado, el resto de los familiares me marcaron el camino, por un lado la gente de la CPM, me entendían en lo legal y en lo humano, ahí de La Plata Sandra Gómez, y un montón de familiares que habían pasado por lo mismo y entendían lo que me estaba pasando”.
Escuchá/descargá la entrevista completa: