Fue distinguido por su trabajo realizado en los últimos diez años como autor y director de obras infantiles y juveniles.
La Fundación Konex entregó sus premios a las cien figuras más destacadas de la última década en Argentina, entre las cuales se encuentra Gastón Marioni, dramaturgo, actor, docente y director teatral platense. “Es la primera que vez que me distinguen con este premio que, por supuesto, recibo con muchísima gratitud y en este contexto que estamos viviendo todos los que formamos parte de la comunidad artística, lo siento como un pequeño abrazo simbólico”, expresé en el aire de Cacodelphia.
“Es un honor y una alegría inmensa estar distinguido entre compañeros y compañeras de nuestro país tan prestigiosos y conocidos”, expresó quien fuera Director General del Teatro Municipal Coliseo Podestá y actualmente es el Director General de su propio espacio Teatro Estudio.
Los premiados se distribuyen en 20 disciplinas de cinco integrantes, como actriz, actor y director de teatro, cine y televisión, además de conducción femenina y masculina, interprete musical, escenografía y vestuario, entre otras. Además hay menciones especiales y por trayectoria y Konex de Honor. Marioni fue reconocido por su trabajo realizado en los últimos diez años como autor y director de obras infantiles y juveniles.
“Comencé hace más de 20 años haciendo teatro en la ciudad de La Plata, y desde esos comienzos, mi trabajo estuvo vinculado con la escritura y la dirección de teatro para las infancias (...) Hice muchas temporadas en el Teatro Argentino, en el Coliseo Podestá, en la República de los Niños, realizando espectáculos musicales infantiles, por eso recibo éste premio con mucho cariño”, recordó.
Parte de todo ese trabajo Gastón Marioni lo recopiló en su primer libro Teatro para Niños y Niñas. Volumen I, que reúne a tres de sus títulos estrenados más distinguidos por la crítica especializada: Tanguito Mío, un musical bien guapito, Los Fabulosos Buu y La Gran Farándula. Estas producciones, explicó, “fueron escritas con mucho cariño con mucho respeto, y que están muy vinculadas entre sí por sus intertextos, las tres hablan de la idiosincrasia argentina, de las problemáticas en la educación y del teatro”.
“Hace años tenía ganas de publicar este libro y la cuarentena lo precipitó. En un momento donde no se podía representar el teatro, creí que leer teatro era una manera de comunicarse con el público y así la idea comenzó a concretarse el año pasado, con la hermosa gente de la Editorial Vuelta a casa”, contó.
“Es una poética que me gusta mucho, que me interesa, que investigo y sigo escribiendo, de hecho tenía cosas previstas para el año pasado y otras para este año, pero hoy no tengo ni ganas de pensarlas” dijo Marioni.
Teatro y pandemia
Con respecto a la situación del teatro en el actual contexto sanitario, el dramaturgo afirmó que teme que el público se comience a deshabituar de la práctica de ir al teatro y que todo ese trabajo que se realizó durante tanto tiempo para acercar al público a las salas de teatro independiente se termine perdiendo. “Más allá del streaming o esas cuestiones, que creo son una falacia total, porque un streaming puede hacer Martin Bossi o los grandes teatros comerciales. El teatro independiente no puede, porque para realizar un streaming digno necesitás comprarte dos o tres cámaras, que no llegas a comprar ni invirtiendo todo lo que laburaste en toda la vida. Por eso digo que la pandemia ha significado un flechazo al talón de Aquiles del teatro”, afirmó.
“Toda la comunidad cultural, está pasando un momento bastante angustiante y en este contexto es difícil pensar en nuevos espectáculos”.
“La situación es trágica y no creo que haya voces desde el Estado, en cualquiera de sus estratos, que tome conciencia de la perdida de ese entramado cultural que ha llevado tanto tiempo construir. Se está desarticulando la construcción cultural y eso realmente me angustia mucho y sobre todo, lo que más me preocupa de eso, es la falta de conciencia”, opinó.
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