Andrés Bacigalupo, de la Asociación Pensamiento Penal, consideró que la Ley de Cannabis Medicinal aún no termina de resolver el tema del autocultivo, y el Estado "tiene que dejar de ser un control policial y ser un control administrativo-médico".
"No hay que poner limitaciones sin sentido, como el de pocas plantas, de metros cuadrados, sin considerar la necesidad de autocultivo", aseguró Andrés Bacigalupo en Los Mundos Posibles.
En ese sentido, Bacigalupo explicó que solo "con ciertos requisitos accedo a la autorización para cultivo medicinal, pero a nivel nacional tiene ciertas limitaciones, y una de las mayores críticas que se le hizo, es que para llegar al registro tengo que firmar una declaración jurada en la que consiento al Estado la habilitación de visitas sorpresas a mi domicilio de la autoridad nacional, para que constate que estoy dentro de los límites autorizados, se termina aceptando una suerte de allanamiento sorpresa".
"Estaría bueno que empiecen a desaparecer las barreras para el acceso al autocultivo con fines medicinales", pidió, y aseguró que "el enfoque previsionista no se manifiesta solo con el uso de la ley penal, lo hace desde la óptica que a planta le dan un cuidado muy privasivo y excesivo en manos del Estado, para dejar de pasar un control policial y que sea un control administrativo-médico".
Sin embargo, el abogado aclaró que "con estas autorizaciones, los cultivadores y usuarios de cannabis medicinal dependen de la óptica del personal de salud, pero sino cuento con la indicación médica que me acompañe, no puedo acceder al registro".
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