Una Joven Prometedora, película guionada y dirigida por Emerald Fennell y estrenada a mediados del 2020, nos enfrenta a los límites del consentimiento, el encubrimiento y la posibilidad de redención ante un problema de dimensiones sociales: el abuso sexual.
De día, Cassie trabaja en la cafetería de su amiga y de noche se dedica a ir a bares para asustar a aquellos hombre bien intencionados que, al verla casi inconsciente, se ofrecen a llevarla a su casa. El problema: nunca lo hacen. ”Es la historia de una mujer que enfrenta a personas, no solo a hombres, con las miserias de su hipocresía y su misoginia. No las castiga necesariamente de manera física, pero sí es una persona que le demuestra al resto, de distintas maneras y con una inteligencia muy clara. Sabe que es lo que tiene que hacer para forzar a las personas para encontrarse con sus propias miserias”, resume Victoria Scotto en el aire de El Verano Prometido.
En el film, Cassie obnubila a los hombre con su belleza y lo sabe. En este sentido, aparece el estereotipo de la Femme Fatale pero de una forma invertida: “Ella lo que usa es su belleza y su atractivo fisico para demostrarles a los varones que son ellos los que usan el sexo para conseguir eso que quieren, que es poder (...) Enfrenta a los varones con que ellos son los productores del prototipo de femme fatale; son ellos quienes inventaron que hay dos tipos de mujeres: la fatal y la buena; y los que pretenden encasillarnos todo el tiempo en esa diada”, explicó.
Victoria señaló que la pelicula no busca ser realista pero “no es para nada inverosímil” ya que “lo hemos visto directa o indirectamente muchas veces”, como por ejemplo “la oleada de denuncias que vivimos en Argentina en 2017, donde dé repente todas teníamos por lo menos una amiga que había sufrido alguna vez un abuso sexual pero ningún varón parecía reconocer fácilmente en su circulo de amigos a varones que fueran abusadores”, explicó.
“Ella lo que quiere es un entorno más justo en donde por lo menos la gente se de cuenta de que hay cosas que no se pueden hacer. Es mucho más lógico, sólo que se trata de una mina que para generar esas situaciones, no tiene mucho escrúpulo”. Por eso, en Una Joven Prometedora, “vemos por primera vez en el medio de un montón de películas y series que trabajan estas cosas, una mujer que no está indefensa. Una mujer que sabe donde esta parada, que tiene herramientas, que tiene la experiencia, que tiene la fuerza, que tiene la certeza. Es un personaje realmente poco común”, concluyó.