Qué había dentro de la cabeza del hombre que escribió las novelas que inspiraron películas clásicas de ciencia ficción como Blade runner, Total recall y Minority report.
Matías Esteban, docente, escritor y agitador literario, se enlazó vía telefónica con el aire de #FuturaEnCasa donde realizó una biografía oral de Philip K. Dick (1928-1982) el autor estadounidense que se destacó dentro de la ciencia ficción por su particular mirada a la hora de escribir un relato: “Una de las cosas que notamos cuando empezamos a leerlo es cierto rose con la locura, con la distorsión de la realidad, con el cuestionamiento social de aquello que llamamos realidad, con ciertas disputas políticas dentro de la sociedad, con el cuestionamiento respecto a la existencia o no de Dios, ese tipo de temáticas aparecen constantemente en sus relatos”.
“Tiene una formación de cultura clásica, si bien no es de aquellos que se ha educado en grandes universidad o grandes colegios, es alguien que ha leído mucho por su propia cuenta y tiene una gran cantidad de lecturas filosóficas, de los escritores rusos, de Kafka, de la pintura, de la música clásica, de la música barroca, toda una formación importante con respecto a eso y también con la cultura popular porque es un gran consumidor de comics, de ciencia ficción”, dijo el columnista del responsable de ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (1968), Podemos recordarlo por usted al por mayor (1966)y El informe de la minoría (1956).
Según la mirada de Esteban, la gran característica del novelista fue la presencia de “ciertos problemas del tipo psicológico que se filtran en su literatura, Dick era una persona con muchas complejidades psiquiátricas, que vivía muchas situaciones de incertidumbre, en un montón de entrevistas manifestaba que tenia visiones, que veía cosas, que alucinaba y mantenía diálogos con entidades divinas, lo decía en serio, el estaba convencido que eso sucedía”.