Luego de tres jornadas en las que se desarrolló en La Plata el Encuentro Plurinacional de Mujeres y Disidencias más concurrido de la historia, que tendrá como próxima sede a la ciudad de San Luis, Marta Dillón dialogó en Paseo Inmoral para reflexionar sobre el evento que reunió alrededor de 500 mil mujeres, lesbianas, trans, travestis, bisexuales e identidades no binaries.
Marta, una de las impulsoras del movimiento Ni una menos, que actualmente es editora del suplemento Las 12, del diario Página/12; y también creadora de otro suplemento del mismo diario como LGTBQ Soy, en primer lugar reconoció que el Encuentro es inabordable, ya que suceden muchas cosas al mismo tiempo: "Tiene una lógica que es propia y que tiene un dinamismo enorme. Por suerte hay muchas compañeras que van contando 'pedacitos' y asì se va armando todo lo que sucedió en este gran evento", agregó.
"No tengo esperanza ... tengo la certeza de que hay continuidad en el movimiento"
Luego de las extensas jornadas del pasado fin de semana, que reunieron a la mayor cantidad de participantes en la historia de los 34 Encuentros, la periodista y escritora reflexionó acerca de lo vivido recientemente: "Lo positivo es que, evidentemente, el movimiento feminista sigue creciendo. Cuando digo feminista uso la palabra con toda conciencia. La expansión del encuentro, la columna de sindicalistas que marchò, las secundarias de Capital Federal marcharon y fueron como 600 chicas auto organizadas. Esa organización de pibas entre 13 y 16 años son parte de lo positivo, y también el tipo de debate que se dio. La enorme marcha contra los travesticidios también sumó mucho por su masividad; el encontrolazo también aportó debate y fiesta que tiene q ver con la militancia LGBT muy fuerte. Esa expansión constante de las posibilidades de discutir y debatir la política y la cultura es fundamental en los encuentros".
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Uno de los debates con más peso en las distintas asambleas y comisiones previas al Encuentro - que se extendió a los diversos talleres, conversatorios, plenarios y a las calles durante los tres días - fue sobre la intención de la comisión organizadora de no querer nombrar al Encuentro como Plurinacional y con las identidades disidentes. Al respecto, Marta expresó que no aceptarlo es querer "tapar el sol con las manos". Y agregó: "Hay que pensar profundamente cuál es la intención política de no poder ampliar y no poder nombrar. Lo duro de eso es reconocer el racismo internalizado en todos lados y los feminismos se tienen que hacer cargo de eso. No se puede estar pensando que las cosas son igual que hace mucho tiempo. Estos debates son parte de las revoluciones y parte del movimiento".
"El feminismo no debería permitirse ser conservador, pero la verdad es que existe. Lo cierto es que las fuerzas conservadoras tampoco quieren ser feministas. Ser mujer no implica ser feminista. Asumir el feminismo implica asumir algo muy profundo, una transformación. El feminismo viene a cuestionarlo todo. Hay muchas personas que no quieren que estos encuentros sean feministas, y de estos encuentros sale la campaña por el aborto legal, por ejemplo", explicó.
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Paseo Inmoral, lunes a viernes, desde las 19 horas.