El politólogo Sergio Morresi, se refirió a la investigación que hace varios años realiza sobre el partido que lidera Mauricio Macri. "El PRO se construyó para alcanzar la presidencia de la Nación". La anatomía de un partido fabricado para ganar.
Mauricio Macri rechazó cargos en diferentes gobiernos, con aspiración a llegar a la presidencia de la Nación. Pese a su clara posición de centro derecha, es pragmático ante varios posicionamientos políticos: se pone del lado de lo conveniente. Sin embargo, posee políticas económicas internacionales y nacionales muy claras.
Sergio Morresi sostuvo que el Pro, al igual que el kirchnerismo es un partido producto de la crisis del 2001. "La argentina rechazó la dirigencia política empresarial de los años 90, y se ofrecieron dos nuevas respuestas formadas a partir de la sociedad civil, el kirchnerismo y el pro”, afirmó.
“El kirchnerismo contuvo a los movimientos sociales más del palo de la izquierda e incorporó a dirigentes peronistas y el PRO a las ONG que venían trabajando más del lado del voluntariado católico e incorporó a políticos más conservadores y empresarios”.
Un partido con políticas económicas claras
Morresi afirmó que el PRO se muestra como un partido pragmático, que toma posicionamiento político ante algunos escenarios según lo que la mayoría de la gente prefiera. Sin embargó, afirmó, en el aspecto económico mantiene dos posturas muy claras. La primera tiene que ver con el posicionamiento de Argentina en el conecto internacional. “El PRO rechaza los actuales aliados de Argentina con una mirada importante hacia América Latina, y la mirada hacia socios alternativos como podrían ser Rusia y China. Plantea un ‘volver al mundo’, que significa aliarse con Estados Unidos, la Unión Europea y ser parte de la Alianza de Pacífico”, explicó.
El otro posicionamiento tiene que ver con la visión que se tiene del funcionamiento de las empresas en el país. “No importa si las empresas son estatales o privadas pero debe primar el criterio de eficiencia”, sostuvo Morresi. “El problema es considerar sólo este criterio, la eficiencia implicaría, por ejemplo, que como a Aerolínias no le es eficiente viajar a ciertas ciudades de Argentina, esos viajes no se hagan y no se piense en que es bueno que las ciudades de Argentina estén conectadas por una empresa de aéreo-navegación”.
El PRO siempre se posicionó con perspectivas de alcanzar la presidencia
Los autores de Mundo Pro, sostienen que el PRO es el primer partido de centro derecha que realmente ha apuntado a ganar la presidencia. Hasta entonces los grupos de derecha han alcanzado el poder a través de conseguir cargos en gobiernos o a través de golpes de Estado. “Después del 2001 la derecha aprendió a vivir en democracia. Eso en algún punto es positivo, porque ya no juega al juego del golpe de estado, se presenta a elecciones”, aseguró Morresi.
“Macri cuando decidió meterse en política, tuvo la oportunidad de ser candidato del peronismo y siempre dijo que no, lo que hizo fue una estrategia de largo plazo. Intentó trabajar desde la ciudad de Buenos Aires como bastión para poder mostrar en la campaña electoral”
Siendo que el PRO llega a la presidencia con mayoría kirchnerista en el Congreso y amplia cantidad de gobernaciones, no va a poder evitar la negociación. “El pro necesita generar consenso, porque no es un proyecto que hoy pueda plantearse como hegemónico. Tiene que negociar con sus propios aliados y con los opositores. La capacidad que tiene para negociar la veremos en los próximos meses. Se mostrará si el Pro va a tener un proyecto más a o menos claro, a través de la negociación o si es incapaz de hacer esa negociación”, concluyó.
'Mundo Pro: anatomía de un partido fabricado para ganar', es producto de una investigación realizada por Sergio Morresi y Gabriel Vommaro junto a Alejandro Bellotti miembros del Instituto del Desarrollo Humano de la UNGS. En el mismo reconstruyen la historia y la vida interna del partido de Mauricio Macri.