Entrevista a Sofía Carabelos, del Colectivo de Investigación y Acción Jurídica
Se cumplen nueve años de un nuevo caso de violencia policial. En la mañana del 14 de octubre de 2002 Cristian Pérez fue arrollado por un tren en la localidad de City Bell. La última vez que se lo vio con vida, Cristian, de 18 años de edad, había estado durante esa madrugada en la Comisaría décima de La Plata. De acuerdo a los registros de la causa, Cristian había llegado a la dependencia policial acusado de haber atropellado con su auto a un joven, hermano de un policía de esa seccional. La hipótesis sostenida por el Colectivo de Investigación y Acción Jurídica (CIAJ) es que fue duramente golpeado en la Comisaría y posteriormente fue dejado en estado de inconsciencia sobre las vías del tren.
Sofía Carabelos, del CIAJ, en comunicación con RAP explicó todas las irregularidades que se detectaron en la causa que darían cuenta de la responsabilidad policial. Firmas falsificadas de Cristian, la presencia de un patrullero en las cercanías de las vías antes de que pasara el tren y falsas actas médicas son algunas de esas anomalías. Carabelos sostuvo que en un primer momento la causa se caratuló como “suicidio”, pero la investigación llevada a cabo permitió que se abrieran dos nuevas líneas judiciales. Por un lado, encubrimiento por parte de los uniformados; por otro, delito de homicidio. “Durante años la justicia no entendió que no se trataba de un suicidio. La causa la inventó la policía durante cinco años y el poder judicial la compró”, enfatizó Carabelos. A su vez detalló que de la causa de homicidio no ha habido avance alguno. “No tenemos ningún imputado por el delito de homicidio, los que están imputados es por encubrimiento por las irregularidades que pudimos demostrar”, agregó la integrante del CIAJ.