Lunes 6 de junio
Entrevista a María del Carmen Verdú, integrante de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI).
Iván Eladio Torres desapareció a los 26 años, el 2 de octubre de 2003. Dos testigos denunciaron haberlo visto con vida por última vez en una comisaría primera de Comodoro Rivadavia.
El 4 de octubre de 2003, la mamá de Iván, María Leontina Millacura Llaipen, concurrió a la dependencia policial para denunciar la desaparición de su hijo, pero los efectivos de turno se negaron a recibirla. Retornó los días 6 y 8 de octubre pero tampoco logró radicar la denuncia. No fue hasta el 14 de octubre, después de que la noticia sobre la desaparición del joven tomara estado público, cuando en la seccional primera finalmente aceptaron recibirle la denuncia.
Por pedido de la querella, la causa fue elevada a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. El caso llegó a esta instancia porque desde la desaparición del joven y ante el fracaso de instancias previas de la justicia nacional, el caso se presentó ante la Corte donde el Estado deberá responder por la acusación de graves violaciones a los derechos humanos de la familia Torres. La próxima audiencia será el 20 de junio y allí las partes deberán hacer entrega de los alegatos por escrito, mientras que recién en setpiembre podría conocerse el fallo de la Corte Interamericana.
En comunicación con RAP, María del Carmen Verdú, integrante de la CORREPI se refirió a la causa y explicó que representa “una situación que lo convierte en uno más de los cien chicos que han desaparecido sin dejar rastro desde 1983 a la fecha después de haber sido vistos por última vez subiendo a un patrullero o estar detenido arbitrariamente en un patrullero”.
El 4 de octubre de 2003, la mamá de Iván, María Leontina Millacura Llaipen, concurrió a la dependencia policial para denunciar la desaparición de su hijo, pero los efectivos de turno se negaron a recibirla. Retornó los días 6 y 8 de octubre pero tampoco logró radicar la denuncia. No fue hasta el 14 de octubre, después de que la noticia sobre la desaparición del joven tomara estado público, cuando en la seccional primera finalmente aceptaron recibirle la denuncia.
Por pedido de la querella, la causa fue elevada a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. El caso llegó a esta instancia porque desde la desaparición del joven y ante el fracaso de instancias previas de la justicia nacional, el caso se presentó ante la Corte donde el Estado deberá responder por la acusación de graves violaciones a los derechos humanos de la familia Torres. La próxima audiencia será el 20 de junio y allí las partes deberán hacer entrega de los alegatos por escrito, mientras que recién en setpiembre podría conocerse el fallo de la Corte Interamericana.
En comunicación con RAP, María del Carmen Verdú, integrante de la CORREPI se refirió a la causa y explicó que representa “una situación que lo convierte en uno más de los cien chicos que han desaparecido sin dejar rastro desde 1983 a la fecha después de haber sido vistos por última vez subiendo a un patrullero o estar detenido arbitrariamente en un patrullero”.