Desde su llegada al poder en 2022, el lider enarbola la bandera del panafricanismo en la región. Con medidas proteccionistas y alianzas estrategicas consolida una fuerza que juega fuerte en el mapa geopolitico.

“Bajo la bandera del panafricanismo, en Burkina Faso emerge un proceso junto con Mali y Níger, algo que se llama la Alianza del Sahel, que es una confederación que se creó inicialmente como una especie de pacto de defensa mutua, pero que también busca avanzar hacia una integración económica y política”, introduce Alejandro Palombo
El columnista de Los Mundos Posibles remarca que “lo importante que es la llegada de Ibrahim Traoré. Es, como parafarseando una canción de Los Redondos, se adelantó el regreso de (Thomas) Sankara, que fue un revolucionario gobernador del país, pero Traoré, desde el punto de vista de la retórica, es más moderado, es un poco más perpicaz, calculador, sagaz”.
El líder llegó al poder en septiembre del 22, mediante un golpe de Estado. Y desde entonces , adoptó una postura antioccidental, apoyándose en Rusia y en China, también expulsando a las tropas francesas.
El Licenciado en Ciencias Políticas cuenta que implementó “políticas de soberanía económica, de control de los recursos naturales. Traoré prohibió exportar oro sin refinar, agregarle un poco de valor mínimamente al oro que sale del país. Se aprobó la construcción de la primera refinería nacional con capacidad para procesarlo. Se decidió salir de la comunidad económica de los Estados de África, es decir, del halo controlador francés”.
Traore también promovió la agricultura, la industrialización, en el reparto de tractores, de motocultores, de motobombas para agricultores, la producción de tomate y de arroz.
Por último, sobres las alianzas que fue construyendo, explica que una es China, “fue fortaleciendo los lazos económicos con la región, suministrando no solo en términos de comercio, mayor compra de recursos o de producción local, sino también vehículos blindados, morteros, armas, municiones”.