El diputado santafecino cree que el Gobierno Nacional está utilizando las amenazas de presuntos narcoterroristas para ejercer más control sobre la población con el uso de las fuerzas, y no para definir una política de seguridad.
“En realidad la investigación sigue por buscar quiénes son los asesinos materiales y después, cuando eso se produzca, habrá que ver y diferenciar entre estos asesinos materiales y los ‘titiriteros’. Quiénes los movieron y tomaron la decisión de matar a Pillín, Bracamonte y Atardo”, remarca Carlos Del Frade, periodista y diputado provincial de Santa Fe por el Frente Social y Popular.
En diálogo con Los Mundos Posibles, Del Frade explica que “en medio de esa situación que están investigando desde la fiscalía, lo que también queda claro es que empezó a hacerse más denso el clima en los barrios, que era lo que nosotros alertábamos. Hubo dos asesinatos en distintos lados, uno de ellos fue la balacera el día del partido de Central con Racing contra ‘Pitito’ Martínez, que era (seguramente el que lo iba a reemplazar a ‘Pillin’ en la barra de Central”.
En las últimas horas circuló un video donde un grupo de personas encapuchadas amenazan al gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro y a Patricia Bullrich, Ministra de Seguridad, y se pueden observar armas de gran calibre como subfusiles FMK3, , un FAL, una escopeta del 12 y pistola Glock.
Para Del Frade “es muy curioso, muy raro, pero tiene el objetivo que le está dando el gobierno nacional de generar control social, a través de una preocupación muy grande por esto de las amenazas, que se hacen así de forma prácticamente masiva, de parte de quienes graban las voces que salen en el vídeo, así que le sirve para eso más que una política pública de seguridad”.
Por último, el entrevistado asegura que “ese es el problema que tenemos a principios de diciembre, un mes específicamente sensible, y parece que con este vídeo se va a justificar una mayor presencia de fuerzas de seguridad, tanto nacionales y provinciales, sobre las dos mayores provincias argentinas, como son Santa Fe y Buenos Aires, con la excusa de evitar que se concreten amenazas, de lo que ellos llaman siempre narcoterrorismo, y en realidad no parece ser algo de eso”.