Bajo las directivas de ajuste impartidas desde del Gobierno nacional, el organismo de ciencia y tecnología dejó en suspenso la continuidad de 250 postulantes a becas posdoctorales. Cuáles son las consecuencias del recorte. Qué respuesta dan los funcionarios ante el reclamo de los científicos.
Profesionales del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) realizaron una jornada nacional de protesta convocada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), que tuvo su epicentro en el Polo Científico de Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La suspensión de 250 becas pos-doctorales fue uno de los reclamos centrales de la medida, que también puso el foco sobre el recorte de personal, una importante reducción en materia de convocatorias para becarios y el congelamiento de los fondos para trabajos destinados a investigación.
“El esquema de las becas es el siguiente: se empieza la carrera con una beca doctoral que dura cinco años, luego se presenta una beca postdoctoral que dura tres años y eventualmente se aspira a entrar en la carrera de investigador científico, es decir, un puesto de planta permanente como investigador en el CONICET”, explica Julián Del Plá, de Jóvenes Científicos Precarizados, en el aire de Los Mundos Posibles.
Según lo explica Del Plá, durante los últimos quince años, el esquema de becas estaba armado de tal manera que, si uno ganaba la beca postdoctoral y luego se presentaba a carrera de investigador, como las fechas de llamado de carrera eran en un determinado momento del año y los resultados de esa evaluación se entregaban en otro momento distinto, momento que a veces podía ser de seis meses o a veces de hasta un año y medio de la evaluación, se le daba a los becarios pos-doctorales un reaseguro económico hasta que estuvieran esos resultados.
A diferencia de años anteriores, y transgrediendo no sólo usos y costumbres del CONICET sino la propia normativa que rige al organismo, no se prorrogó ninguna de las becas doctorales que concluyeron el 31 de julio. El resultado de las postulaciones a becas pos-doctorales aún no están, ni se sabe a ciencia cierta cuándo estarán, lo que se traduce en una expulsión de 250 trabajadores y trabajadoras fuera de la carrera de investigación.
“Es muy probable que todos aquellos que tengan la posibilidad de encontrar trabajo afuera lo empezarán a buscar; aquellos que no, buscarán en el sector privado; y muchos tendrán que buscar alternativas de trabajo en otros rubros, lo cual es una enorme pérdida para el sistema científico, un golpe a la capacidad de investigación de este país”, se lamenta Del Plá.
Durante la jornada de protesta, los trabajadores ingresaron al hall del Polo Cientifico donde hicieron escuchar su reclamo hasta que fueron recibidos por funcionarios de segunda línea dentro del organismo.
“El directorio de CONICET ha sido el ejecutor directo de esta política de ajuste, que lógicamente es parte de una política más general de ajuste del Gobierno nacional, y que está impactando de forma muy brutal en nuestro sector”, describe el entrevistado, y agrega: “Hemos tenido recortes en becas doctorales, lo mismo en becas postdoctorales, además del recorte en salario, despidos de los compañeros administrativos, es decir, estamos en una situación muy compleja en el sistema científico”.
La medida de fuerza en el Polo Científico sirvió para conseguir una promesa de reabrir las mesas de negociación entre el Directorio y los trabajadores del CONICET, y volver a discutir el pliego de demandas que no sólo incluye la cuestión de la becas sino que también abarca otras demandas laborales como obra social, aguinaldo, goce de licencias y aportes jubilatorios.
A modo de cierre, Del Plá dice que “hasta ahora el directorio venía jugando un papel de mediador entre el presidente de CONICET (Daniel Salamone) y los trabajadores con representación gremial, planteando que ellos tenían una posición neutra o estaban tratando de navegar la política de ajuste nacional para que golpeara sobre el CONICET lo menos posible”, y concluye: “Esta vez han demostrado que, por el contrario, ellos están siendo partícipes directos de esa política de ajuste avalando los despidos, avalando que hoy tengamos más de 200 compañeros en la calle, y que además parece ser una política que se va a profundizar”.
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