El comunicador referente de la comunidad LGTBIQ+ analiza el fenómeno de Cris Miro, la serie de la icónica figura trans, y reflexiona sobre su irrupción en los medios y los desafíos que afronta el movimiento en la actualidad.
"Hay una voluntad de producir a partir de la viralización y creo que en ese punto un proyecto como 'Cris Miró' funcionó y sedujo a los capitales extranjeros. Es una serie modesta, de baja producción, hasta en algún punto diría con escasa voluntad internacional, puede que se esté viendo afuera, pero creo que tiene una ambición más local", considera el periodista Franco Torchia.
La producción dirigida por Martín Vatenberg y Javier van de Couter es protagonizada por Mina Serrano, que relata la biografía de la artista, y su vertiginoso ascenso como la primera vedette travesti en la revista del Teatro Maipo.
"Lo que nos pasa a los que trabajamos en diversidad con este tipo de fenómenos es que hay generaciones enteras que son resistentes a la lectura de material escrito, son digitalizadas para las que la diversidad sexual, solo se cuenta de forma audiovisual y descubren ahora a Cris luego de un viral y después ven la serie", sostiene el referente de la comunidad LGTB.
En diálogo con Los Mundos Posibles, Torchia menciona que "es la vida de una trans que intenta contar la vida de todas las trans, y la verdad que no, porqué universalizar una historia concreta es un problema, porqué todas nuestras historias se terminan pareciendo", y asegura que "si se trata de una vida LGTBIQ+ la demanda (de la industria) es que sean experiencias intensas y la exigencia de drama termina siendo más grande para que merezca ser contada esa historia".
Sobre los puntos de partida de la industria audiovisual en cuanto a experiencias trans, el entrevistado cree que "hay un rasgo a señalar que es de origen, desde que estas producciones se conciben, si son mas o menos masivas, la idea principal es contarle estas vidas a las audiencias heteros cis, ahí hay un disparador mal parido que no sé si tiene solución".
"La década del 90 (en la que se popularizó Cris Miró), en relación a lo que conocemos como diversidad sexual, fue la mas productiva, precisamente por un derecho que tenemos que defender hasta el día de hoy, el derecho a contradecirnos porque en teoría no podemos, se nos tiene prohibida la contradicción. Reivindico fuertemente ese derecho", reflexiona Torchia.
Por último, sobre los desafíos que afronta la comunidad LGTBIQ+ en un contexto político adverso, considera que el movimiento "tiene que establecer más conversaciones internas, más ricas, mas complejizadoras y preguntas, seguir hablando afuera, porque afuera la tempestad es cada vez mas grande, salir a hablar más reforzados y autocríticos".
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