La coalición Nuevo Frente Popular (NFP) da la sorpresa en el balotaje al situarse primera en las elecciones legislativas y relegar al tercer puesto a la fuerza de Le Pen, que tenía expectativas de formar gobierno. Cómo sigue Macron, segundo, en este nuevo escenario de cara a la transición.
“Hay un giro dramático en esta novela que es Francia, porque de ser la noticia, hace una semana, que la ganadora de las elecciones era la ultraderecha y que parecía inevitable, ahora ganó la izquierda”, considera Alejandro Palombo, licenciado en Ciencias Políticas.
La Francia Insumisa (LFI), el Partido Socialista (PS), el Partido Europa Ecología Los Verdes (EELV) y el Partido Comunista (PCF), armaron una coalición de izquierda: el Nuevo Frente Popular (NFP), que se quedó con un primera lugar en la votación general que no estaba en los planes. “Se venía viendo que no estaban tan mal en las encuestas, algunas la daban a un punto o a cuatro, pero ganar estaba fuera de todo pronóstico", asegura.
El Nuevo Frente Popular se quedó con 182 bancas, mientras que Ensemble de Macron, que salió segundo, se queda con 163 escaños, y Reagrupación Nacional (RN) con 143.
“Hay un rechazo popular a entregarle una mayoría absoluta a la RN de Marine Le Pen, porque se votó masivamente lo que se llamó el cordón republicano, que incluye gente de centro derecha, centro, de izquierda, todo contra lo que podríamos llamar el neofascismo”, explica el columnista de Los Mundos Posibles.
Sobre cómo serán los próximos pasos de Macron de cara a la transición, Palombo dice que “tiene tres opciones, explotar las diferencias al interior del Nuevo Frente Popular y dividirlo, para lograr una mayoría que se apoye en él, que quedó bastante bien parado para como venía la mano; la otra es la salida de un gobierno tecnocrático, de expertos, economistas, de académicos, lideres empresariales y sindicales para un Francia que no tiene experiencia en este tipo de gestiones; y la otra es aguantar un año y volver a disolver la asamblea”.
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