El escritor y músico marplatense presenta un disco dedicado a la obra del escritor argentino. En "Ausencia de amor" recupera su sensibilidad poética, su compromiso por la justicia y la libertad.
En “Ausencia de amor”, Luis Caro rindió homenaje al poeta Juan Gelman, con quien mantuvo una relación de amistad que trascendió el tiempo. “Nos conocimos en los años ’80 y siempre tuve ganas de realizar un disco solamente con su poesía, musicalizada por las diversas sonoridades que den cuenta de nuestras músicas populares”, cuenta el músico que por primera vez graba un trabajo íntegramente dedicado al poeta argentino fallecido en enero de 2014.
“Desde los años ’80 vengo trabajando con la obra de Juan, por eso, cuando decidí llevar adelante este trabajo, comencé con aquellas composiciones que había grabado hacía muchos años”, detalla el artista marplatense, que tiene más de treinta poemas musicalizados de Gelman. Además, del que dio nombre al nuevo trabajo, se escuchan “Soneto de dulzura”, “La más mujer del mundo“, “Ausencia“, “Los héroes” y “Viendo la gente andar”.
En 1985, Caro editó el disco “Río de Sones”, un trabajo donde por primera vez incorporó textos musicalizados del poeta nacido en Villa Crespo en 1930. “Ese material tenía cuatro o cinco poemas que había musicalizado en el formato canción y que el Tata Cedrón, un tipo muy generoso y muy inspirador, a quien yo iba como siguiendo, porque antes de Gelman había musicalizado algo de Tuñón y de León Felipe, le acerco a Gelman, que entonces vivía en la calle Edgar A. Poe N 4 de Paris, en Francia”, recuerda el artista que supo compartir escenario con Alí Primera, Los Jaivas, Nicomédes Santa Cruz, Soledad Bravo, Amparo Ochoa, Joan Manuel Serrat y Mercedes Sosa, entre otros grandes artistas.
“Una de las composiciones que integraba ese trabajo la compuse a partir de una carta que había leído en la Revista Caretas, donde Gelman le escribía a Paco Urondo. Esa canción a Juan le gustó mucho y me lo hizo saber a través de una carta, a partir de la cual comenzamos un vínculo epistolar”, relata Caro el comienzo de la relación con el poeta que en el año 2007, obtuvo el Premio Cervantes, considerado el máximo galardón a las letras hispanoamericanas.
“Después de aquel trabajo quedé agarrado a la palabra de Juan, que durante mucho tiempo formó parte mi la cotidianidad”, dice el cantor que también editó “Viendo la gente andar”, donde -además del poema que dio nombre al trabajo- se aventuró también a ponerle música a textos de Gelman como “Basta, no quiero más”, “Soneto de dulzura” y “Llamamiento contra la preparación de una guerra atómica”.
Entre 2000 y 2003 Luis Caro recorrió México, España, Grecia, Portugal y Canarias realizando performances en metros, parques y paseos públicos; en 2015 su destino fue Londres, donde realizó un trabajo de investigación musical sobre el "busking" y el "arte de repente". Desde el aspecto musical, “Ausencia de amor”, sintetiza todos los géneros que el músico, actor, escritor y dramaturgo marplatense, atravesó en ese andar musical. “En los últimos veinte años he trabajado en muchos lugares del mundo como músico callejero. De ese modo fui agregando a mi formación musical, todas esas músicas que escuche en las calles y que hoy resuenan en este material”, relata Caro explicando las distintas sonoridades que se escuchan en su nuevo trabajo discográfico. “Músicas que remiten a la milonga, la habanera, los sonidos del flamenco, la vidala, el jazz y el fado, sonidos que me ayudaron en este trabajo a marcar una búsqueda estética que no fue fácil encontrar”, suma.
“Ausencia de amor” fue grabado por Fermín Ferraris en arreglos, Juan Miguel Carotenuto en batería y percusión, Juampi Espina en guitarra española, Diego Amerise en contrabajo, Darío Barozzi en guitarra eléctrica, Lucas Albarracín en trompeta e Iván Simanovsky en trombón. “Es un trabajo bastante austero de sonido, que trabajamos con mucha calidez y mucho amor. Fue hermoso trabajar con ellos, me gusto esa energía, además les interesaron estas historias”, detalla en Cacodelphia.
Luis Caro se inició en la Comedia Marplatense que dirigía Gregorio Nachman, director de teatro desaparecido durante la última dictadura militar. En 1976 vivió en Perú, Ecuador y Panamá, recorriendo en forma itinerante toda Sudamérica. De regreso a su ciudad, ya en democracia, continuó desarrollando su camino artístico personal, al mismo tiempo que abordó diferentes proyectos artísticos. Presidio la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, fundó la Red Federal de Cultura y promovió la Ley provincial de Artes. Recibió la distinción "Al maestro con cariño" por parte de Deportea (2003), fue declarado Ciudadano Ilustre de la ciudad de Mar del Plata (2014) y fue distinguido con el "Leonardo Favio" del Concejo Deliberante de General Pueyrredón, por su aporte a la cultura nacional y popular. En febrero de 2022 presentó el proyecto "País Semejante" en el CCK y este año a través de las distintas plataformas de música lanzo “Ausencia de amor”, un disco que da cuenta de su admiración por la poesía. “Desde muy joven, tipos pesados, como Vallejos, Tuñón y Gelman, despertaron en mí la pasión por la poesía”, dice el artista que el 29 de junio inició una gira que lo llevará a Bilbao, Pamplona, San Sebastián, Hondarribia, Hendaya, San Joan de Luz y Biarritz, ciudades todas que forman parte del País Vasco.
Encuentro con el poeta
Luis Caro finalmente se encontró con Gelman una tarde de 1989 en la redacción del diario Página/12, donde tenía pautada una entrevista con Carlos Polimeni. “En esos días, me había enterado que Juan podía estar en la Argentina, aunque era un tiempo complicado, porque la justicia sosteniendo la teoría de los dos demonios, lo consideraba prófugo en la Causa Montoneros y entonces andaba medio clandestino. De todos modos, pregunte en la mesa de entrada, si Gelman había llegado al diario y un tipo que estaba hurgando entre la correspondencia se da vuelta y se presenta. Era él. Ahí nos conocimos, después de habernos escrito durante muchos años”, repasa.
“Nos abrazamos y nos fuimos a un bar, él se pidió un par de ginebras, porque, según decía, es la que abre el corazón y conversamos durante dos horas. Me preguntaba por aquellas pequeñas cosas simples de la vida, no era el prototipo del intelectual encerrado y aislado de la calle, se interesaba por saber que pasaba con sus poemas cuando los cantaba y yo le conté las dificultades que atravesábamos los músicos independientes, lo difícil que era en esos tiempos complejos, presentar la poesía y como iba perdiendo el poco público que había cosechado. Los dos nos reímos mucho aquella tarde”, recuerda el marplatense.
En ese primer encuentro con el poeta, Caro le contó sobre la repercusión de un texto suyo, que él había musicalizado y resonaba fuerte en Managua. “Se trata de ‘Testamento de Pepe Díaz Soldado’, un homenaje que Gelman le hizo a Sandino y que formó parte de ‘Gotan’, que musicalice a comienzo de los años ‘80, y que a través de unos compañeros internacionalistas llegó a Nicaragua, donde el grupo ‘Tierra brava’, lo grabo, lo popularizo y sonó mucho en el medio de aquel despelote”, rememora.
A comienzos del 2000, viajó a dar unos conciertos en la UNAM: “Después de aquel primero encuentro nos dejamos ver por unos años, hasta que volvimos a encontrarnos en México, un tiempo donde Juan ya estaba muy metido en la búsqueda de su nieta”.
Durante la última dictadura cívico-religioso-militar, fueron secuestrados y asesinados el hijo del poeta, Marcelo Gelman y su nuera María Claudia García, que se encontraba entonces embarazada. El 31 de marzo de 2000, luego de años de intensa búsqueda, Gelman pudo reunirse con su nieta en Uruguay. “En el marco de esa lucha para encontrarse con su nieta, quizá Juan, haya escribió lo más conmovedor de su obra”, expresa.
Juan Gelman aseguró el músico, no solo fue un destacado poeta, sino también un ser humano de gran sensibilidad y compromiso. “Por eso los temas con los que está construida su poética nunca van a perder vigencia, porque fue un poeta que se metió con las cosas más pesadas de la vida (...) Su obra se sostiene también en esa militancia, en esa lucha de toda una vida por la justicia y la libertad”, destaca.
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