Desde la Red de Casas Antiguas aseguran que los espacios “forman parte de un eje que ya está consolidado como patrimonio” y que “los objetivos se equilibran con la consulta popular”. El proyecto impulsado por el intendente Julio Alak busca remodelar las plazas San Martín e Italia.
El gobierno municipal de Julio Alak presentó un plan de renovación integral de la Plaza San Martin, lo que demandará una inversión de 3 mil millones de pesos, con el objetivo de “recuperar su carácter institucional y así optimizar su conexión con el Palacio de la Legislatura, la Casa de Gobierno bonaerense y el Centro Cultural Pasaje Dardo Rocha”.
Sin embargo, vecinos en defensa del patrimonio cultural y natural expresaron su preocupación y alerta por los alcances del proyecto del oficialismo platense. Asimismo, la oposición asegura que es un proyecto que incumplió el trámite pertinente en la Comisión de Planeamiento.
“Estamos en estado de alerta realmente, no se ha publicando suficiente información como para tener una opinión más detallada”, dice Cristina Avinceta, Arquitecta. Especializada en patrimonio, de la Red de Casas Antiguas.
“Está perdiendo sus valores, cuando hablamos de esto, hablamos de valores estéticos y sociales. La Plaza San Martín los tiene y mucho. Forma parte de un eje que ya está consolidado como patrimonio y es reconocido por la comunidad tal como está. Entonces qué es lo amerita un cambio de semejante envergadura”, se pregunta en Los Mundos Posibles.
También lamenta la idea de “ampliar las veredas y los espacios de circulación peatonal cuando ese no es el problema, hemos tenido serios inconvenientes por embaldosar la ciudad, por pavimentar sobre los adoquines y seguimos poniendo más cemento, ni siquiera respetando los colores tradicionales de las calle de la ciudad que son parte de su identidad, todo hace que la sociedad se preocupe, que esté alerta por los peligros de uniformización y despersonalización de esos espacios que son únicos”.
“Una plaza es un documento histórico, hacen a los valores y tradiciones de una sociedad. Si eso está amenazado, va a repercutir. Los objetivos se equilibran con la consulta popular, teniendo prudencia, sistematización y disciplina a la hora de intervenir en un espacio público”, concluye.
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