Ante la posibilidad de vencimiento de las Asignaciones Específicas del Fondo de Financiamiento de instituciones culturales de la Nación, desde el Instituto Nacional de Teatro promueven charlas hacia dentro de la comunidad para pensar acciones en conjunto.
El vencimiento de los Fondos Específicos culturales encendió las alertas en diferentes sectores de la cultura y la comunicación que trabajan en la promoción y fomento de sus actividades. En el caso del Instituto Nacional de Teatro (INT) “significa el 95% de lo que el instituto tiene como fondos para funcionar, omsea que quedaría totalmente desfinanciado”, detalló Alfredo Badalamenti, delegado de la Regional Centro del INT.
“Esto significa que hoy, de lo que se recauda de los impuesto que generan los propios medios audiovisuales, hay una parte que se destina al fomento de la misma actividad y que va automáticamente a estos institutos que fomentan la actividad independiente, no de la cultura no hegemónica. Porque en realidad tanto una radio comunitaria como el teatro independiente lo que hacen es sostener y fomentar aquello en lo que el sector comercial no está interesado y que por esto no significa que tenga menos valor”, agregó.
Solo durante 2021, gracias a los Fondos de Financiamiento el Instituto Nacional de Teatro sostuvo 553 grupos y elencos de todo el país; 516 salas y espacios de teatro independiente; 222 Festivales, Eventos, Ciclos y Programaciones de Teatro; y asignó 198 becas para la formación, capacitación e investigación en artes escénicas a colectivos y personas del teatro. A esto se suman otras iniciativas relacionadas con políticas de contención, promoción, difusión y acompañamiento de la escena nacional. Sin embargo, fue en 2020 cuanto el Instituto jugó un papel fundamental para el sector: “Hay cantidad de planes de sostenimiento que el Instituto dio en su momento para que la actividad no cesará, de hecho prácticamente no cerraron salas de teatro independiente porque el instituto y el estado nacional siguió sosteniendo la actividad desde el lugar que sea”, explicó Alfredo en comunicación con Una Amiga Imaginaria.
“La actividad comercial y estatal en nuestro país significa el 20% de la actividad teatral. El 80% de la actividad nacional se da en las salas de teatro independiente”
De quitarse estas asignaciones directas provenientes de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, así como también de la actividad del propio sector, los presupuestos de estos espacios quedarían sujetos a los debates presupuestarios del país. “Lo que está sucediendo no debería haber sucedido nunca, no debería habernos pasado, no se nos debería haber pasado esta ley del 2017. Esto nos deja una enseñanza, como todo lo malo que sucede que nos deja una enseñanza: hay que estar muy alerta”, concluyó.