En la tercera audiencia del juicio por el homicidio de Omar Cigarán comparecieron tres testigos. Uno de ellos, llevado por la defensa, acusó un supuesto robo cometido por Omar. Esto desembocó en un llamado de atención del tribunal, quien apuntó que el testimonio no aportaba al esclarecimiento del hecho en juicio. También declaró Carola Bianco, quien formó parte en 2008 del reclamo realizado por organizaciones sociales para que se implementen medidas judiciales que resguarden a Omar y otros niños que se encontraban en situación de calle.
Carola Bianco es docente de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la UNLP y Directora del programa de extensión “Niñez, Derechos Humanos y Políticas Públicas”. Relató en el juicio que tomó contacto con Omar en 2008, cuando dormía junto a un grupo de chicos en la glorieta de Plaza San Martín, luego de haber sido expulsados de la Facultad de Humanidades. Explicó que por aquel entonces fueron “construidos por los medios con el nombre ‘los chicos de la frazada’, como una banda que ponía en peligro la ciudadanía”.
Bianco expuso que organizaciones sociales intervinieron ofreciendo una olla popular en 2008, pero que a los pocos días los niños fueron atacados por personas no identificadas, con palos y cadenas. A partir de allí, se iniciaron actuaciones que incluyeron la presentación de un habeas corpus, para resguardar a los chicos de entre 6 y 17 años que pasaban parte de sus días en la Plaza San Martín. En aquel entonces también se promovió un amparo que exigía la plena implementación del Sistema de Promoción y Protección de Derechos de la Niñez. La abogada remarcó que el mismo, iniciado en 2008, aún se encuentra hoy sin sentencia firme, y está siendo discutido en la Corte Suprema de Justicia de la provincia de Buenos Aires. “El dolor con la muerte de Omar, fue que no nos sorprendió, porque nosotros habíamos advertido que esto podía pasar”, señaló Bianco.
El siguiente testigo fue Luis Celso Latorre, quien testimonió a pedido de la defensa. Relató un robo que habría sufrido el diez de febrero de 2013 en el Barrio Hipódromo, donde dos jóvenes le sacaron la moto apuntándole uno de ellos con un revólver plateado. Indicó que instantes después del hecho vecinos del barrio le dijeron que uno de ellos era “Omar”. Latorre agregó que en la comisaría uno de los oficiales le dijo que “no podían detener al joven porque tiene un habeas corpus”. La acusación intentó llamar la atención sobre una contradicción entre el resumen de las actuaciones por dicho robo, donde no constaba que hubiera declarado Latorre el nombre de Omar a los oficiales. Sin embargo, a consideración de que no se encontraban a disposición las actuaciones propias de esa causa, los jueces consideraron que podía tratarse de una omisión propia de su carácter de resumen.
El último testigo fue Diego Fernando Besombes, actual Jefe Delegación Departamental de Policía Científica La Plata. El día del homicidio de Omar actuó como coordinador pericial. Sostuvo que no realizó pericias, sino que mantuvo diálogo con la fiscal de turno, Ana Medina. Fue ella quien encomendó que fuera la misma bonaerense quien realizara los peritajes, a pesar de la resolución 1390 de la Procuración General, implementada en 2001, que inhabilita a las fuerzas de seguridad para realizar labores en la escena del crimen, cuando un agente de la misma fuerza es sospechado. Esto fue remarcado por la abogada de la querella, María del Carmen Verdú, quién consultó al policía sobre la frecuencia con que no se cumplía la resolución en La Plata. “Salvo por un caso en 2015, que intervino Gendarmería, siempre actuó Policía Científica de la Policía de la Provincia de Buenos Aires”, respondió Besombes.
El oficial también negó haber visto un arma correspondiente a Omar en la escena del crimen, pero afirmó que horas después del hecho recibió un llamado del oficial en servicio de la morgue, quien aseguró haberla encontrado en el pantalón de Omar.
El juicio continuará el viernes 31 de marzo. Se espera que para esa fecha compadezcan los dos testigos restantes. En caso contrario, se dará inicio a la lectura de los alegatos.