Según explican en su web, la propuesta es hacer una recolección y clasificación de fanzines, libros de autor y ediciones autogestionadas para armar un archivo itinerante de consulta y desarrollar actividades vinculadas con la temática. “Nos interesan los fanzines porque son publicaciones autoeditadas, donde vos sos el encargado de los contenidos y elegís dónde distribuirlos, no tenés ningún tipo de filtro, no tenés que esperar que alguien te edite y, generalmente, tienen contenidos que no están en los grandes medios. Vos sos tu propio medio”, explica Lino Divas.
Lino y Enzo son los impulsores de este proyecto, pero el proyecto es colectivo. Las publicaciones que componen la muestra fueron enviadas por fanzineros, editores, lectores y autores de distintos lugares de Argentina y de América Latina. La muestra se podrá visitar hasta el 26 de abril y se prevé que en mayo la fanzineteca esté instalada en el Galpón de Equipajes y Encomiendas La Grieta, en 18 y 71 (Barrio Meridiano V). El año pasado realizaron una experiencia similar en vinculación con la Universidad de Córdoba y, actualmente, los fanzines recopilados se pueden consultar en el centro cultural Casa Taller. “Buscamos que en cada lugar el proyecto se replique y las organizaciones locales gestionen el material autónomamente”, cuentan.
La cultura del fanzine
Los fanzines surgieron en la década del ´40, pero se popularizaron en los años ´60 y ´70 por su vinculación con la difusión de comics norteamericanos y la emergente cultura punk. Llegaron a Argentina en la década del ´80 con la recuperación demócratica como medios de libre expresión y espacio para voces que no tenían espacio en los medios comerciales. “La idea es recopilar estas publicaciones efímeras de las que se pierde el rastro, nos gustaría que haya un registro de eso porque creemos que son un registro de época”, dice Lino.
