Jueves 19 de diciembre de 2013
Entrevista a Milva Benítez, periodista de la revista Otros Círculos.
Foto: Infojus |
El martes 17 la Corte Suprema de Tucumán revocó parcialmente el fallo que hace un año absolvió a los trece imputados en el juicio por el secuestro y la desaparición de Marita Verón. La Corte cuestionó duramente el trato que recibieron las víctimas que vieron a Marita en los prostíbulos riojanos, principales testigos en el juicio. La periodista judicial, Milva Benítez, analiza aspectos de un fallo crucial para la lucha contra el delito de trata de personas.
La Corte Suprema de Justicia de Tucumán, integrada por Antonio Gandur, Antonio Daniel Estofán y Claudia Beatriz Sbdar resolvió revocar parcialmente la sentencia absolutoria, dictada por la Sala II del Tribunal Civil y Penal de Tucumán en 2012. Así, diez de los trece imputados fueron condenados mientras que se sostuvo la absolución de Víctor Ángel Rivero y María Jesús Rivero. La dueña de los prostíbulos ubicados en la ruta 38 donde fue explotada Marita murió impune en febrero. (Ver "Condenaron a los culpables de la desaparición de Marita Verón")
Para Milva Benítez, periodista especializada en temas judiciales, lo que dijeron los jueces de la Corte tucumana es importante para futuros juicios en casos de trata de personas, especialmente para las víctimas de explotación sexual. "La Corte condenó duramente cómo fueron tratadas las mujeres que vieron a Marita Verón en los prostíbulos de La Rioja, siendo que las principales testigos de esta causa son mujeres que fueron victimas de Lidia Irma Medina, José Chenga Gómez y Gonzalo Gómez, dueños de los prostíbulos de La Rioja donde prostituyeron a Marita".
“Tuvieron que volver a ver a sus captores, reiterar las declaraciones, recibieron cuestionamientos. De ninguna manera se puede evaluar con crudeza detalles en los testimonios porque las víctimas de trata pierden la noción del tiempo; muchas eran menores de edad”, afirmó la periodista en diálogo con Rap.
Otra de las críticas de la Corte se dirigió a la mora judicial, teniendo en cuenta que la causa estaba elevada a juicio desde 2004 y tuvo sentencia recién en 2012.
Luego de conocer el fallo que revocó la “sentencia vergonzosa de 2012”, Susana Trimarco afirmó en medios locales que no iba a "agradecer a la Justicia porque esta es su obligación; para eso están ahí y para eso les pagan".
No obstante, la mamá de Marita Verón "remarcó que tiene esperanza en que a a partir de la investigación por la desaparición de su hija, se pueda desmontar en Tucumán una asociación ilícita que esta encabezada por María Jesús Rivero y Rubén "la Chancha Ale", indicó Milva Benítez. El "clan Alé" tiene ademas vinculaciones con temas de narcotráfico, negocios espurios en el fútbol y el manejo del delito en Tucumán. Benítez agregó que "por eso Susana Trimarco, cuando conoce la decisión de la Corte, tiene la esperanza de que ellos no zafen en otra causa en la que se los investiga por lavado de activos proveniente de la trata de personas".
Juicio a los jueces
Cuando empezó el juicio de Marita, Marcelo Colombo, el fiscal que instruye a todo el país de la Procuradoría contra la Explotación Sexual, viajó a Tucumán a dar una capacitación para los miembros de la Justicia. Los tres jueces del Tribunal a cargo de la causa de Marita Verón decidieron no asistir a este curso.
Ese es uno de los primeros episodios que da cuenta de la actuación de los magistrados. Ahora, la Corte Suprema de Justicia de la Nación tiene en sus manos el futuro del juicio político por mal desempeño de los jueces Alberto Piedrabuena y Eduardo Romero Lascano. El tercer integrante del jurado, Emilio Herrera Molina, eludió el jury cuando el gobernador tucumano, José Alperovich, le aceptó la renuncia para que pudiera jubilarse.
En el fallo de la Corte, los jueces recuerdan que ese Tribunal tucumano fundó su decisión absolutoria “en el respeto al principio constitucional de presunción de inocencia”. Habían señalado que “la única prueba con entidad fueron las declaraciones de las jóvenes que estuvieron en algunos de los tres locales de La Rioja y que dijeron haber estado en contacto con la víctima y que en las pruebas restantes, es decir, actuaciones por allanamiento domiciliarios, no arrojaron un resultado positivo”.
Pero al evaluar los testimonios, los desestimaron y reiteraron las contradicciones enunciadas al analizar cada testigo. En el descargo ante la comisión de Enjuiciamiento de la Legislatura que habilitó el jury, el juez Piedrabuena habló de “las naturales pasiones y deseo de venganza de las víctimas y sus familiares”.
En el fallo revocatorio, los jueces de la Corte, además de cuestionar ese trato a las víctimas y principales testigos de la causa, explicaron que las declaraciones testimoniales “exhiben con mucha claridad la intervención de los imputados con el funcionamiento de los locales “Candy”, “El Desafío” y “Candilejas”, lugares que “formaban el ámbito físico de la fase de explotación en la red de trata de personas”.
Así, las declaraciones revelaron prácticas propias de esta actividad como ser “modificar la identidad de las mujeres sometidas, mediante la sustracción de su documento nacional de identidad y la asignación de un “nombre artístico”.
También, permitieron conocer que la provincia de La Rioja aparece como destino de diversas mujeres mayores y menores procedentes de ciudades -entre ellas Tucumán- que arriban para ejercer la prostitución.
¿Dónde está Marita?
Tras conocerse la condena a diez de los miembros de la red de trata que desapareció a su hija, Susana Trimarco dijo que no tenía tiempo para celebrar el fallo porque sigue tratando de encontrar a su hija y se quejó porque "nadie la está buscando".
La periodista Milva Benítez explicó que hay otra causa que busca a Marita Verón, conocida como la “causa paradero”. "A lo largo de estos años se han realizado allanamientos, búsquedas y excavaciones, hay algunas medidas judiciales, pero lo cierto es que las pistas son pocas", explicó Benítez. "Pasaron 10 años, también hay una línea de investigación que indica que Marita puede haber sido sacada del país y llevada a España" agregó al explicar el desarrollo de una causa con poco movimiento mientras la mamá de Marita sigue buscando a su hija y continúa la lucha por la memoria y la verdad.